Embalse de Mequinenza, que recoge el agua del Ebro en Aragón
La Cataluña 'ajena' a la sequía: Tarragona y Lleida se libran de la falta de agua gracias al Ebro
- La abundancia del embalse de Mequinenza mantiene a más de un millón de catalanes ajenos a las restricciones por falta de agua
- El envío de agua en barcos desde Sagunto propuesto por el Gobierno facilitará a la Generalitat seguir cerrando la puerta al polémico trasvase
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Cataluña afronta unos meses muy duros, sin que se antojen como la recta final de una sequía que hace ya tres años que dura. Ésta, incesante, sume en la aridez extrema sus embalses de las cuencas internas, de las que beben seis millones de vecinos de 202 municipios, la gran mayoría de los cuales se concentran en Barcelona y Girona.
Sin embargo, la franja oeste de la comunidad permanece ajena a la falta de agua y las restricciones que viven el resto de catalanes gracias al Ebro. Es en este contexto que ha resurgido con fuerza el debate sobre el trasvase del río más caudaloso de España, mientras la Generalitat se mantiene firme en su negativa a solicitarlo en su territorio y probablemente aceptará un traslado de agua en barcos procedentes de Valencia propuesto por el Gobierno.
Mejoran las reservas de Mequinenza
El mismo viernes en que el Diario Oficial de la Generalitat de Cataluña (DOGC) publicó la declaración de emergencia en gran parte de su territorio con nuevas restricciones para el 80% de su población, alivió al mismo tiempo la presión sobre la mayor parte de Tarragona, que no sufre este problema.
La unidad del Consorcio de Aguas de Tarragona (CAT) ha pasado del escenario de alerta al de prealerta después de que hayan aumentado las reservas del pantano de Mequinenza. Las reservas de este embalse ubicado en Zaragoza se encuentran en un envidiable 83,54% de su capacidad; esto son 1.147 hectómetros cúbicos, un 15% más que hace un año.
El Ebro baja cargado
La comparativa entre los pantanos catalanes (al 15,75%) y el conocido como mar de Aragón (al 83,5%) arroja un contraste desolador, con las abundantes precipitaciones y temporales del pasado otoño -también en Navarra y La Rioja- como elemento diferencial.
Embalse de Ribarroja, en Mequinenza (Zaragoza), en diciembre de 2023
El Ebro baja cargado y abastece a Mequinenza y a los embalses conectados en territorio catalán, los de Riba-roja d'Ebre y Flix; de hecho, la Conferencia Hidrográfica del Ebro -que no es de gestión catalana, sino que depende del Ministerio para la Transición Ecológica- ha abierto sus compuertas esta semana durante varias horas para gestionar la abundancia.
Lleida y parte de Tarragona
Esto permite abastecer de agua las viviendas, negocios, campos e industrias de más de un millón de catalanes afincados al oeste de la comunidad en la provincia de Lleida y en las comarcas de las Terres de l'Ebre, el Camp de Tarragona y parte del Baix Penedès.
Precisamente, esos territorios tarraconenses se benefician del llamado minitrasvase del Ebro, gestionado por el Consorcio de Aguas de Tarragona; este ente cubre 69 municipios (de pequeños a grandes, como el de la capital de la provincia) y depende de la Generalitat, la cual ha rebajado a prealerta su situación, tres estadios por detrás del estado de emergencia y con unas limitaciones muy livianas.
Lleida concluye diciembre con 6.911 personas en paro
Ahora, todos estos municipios ven lejos la época de vacas flacas del año pasado, cuando Mequinenza cayó a su mínimo histórico -un 22%- y obligó a cerrar el Canal d'Urgell antes de tiempo y a recortar a la mitad la concesión de agua de la CHE, con su consiguiente impacto sobre los regantes y sus cultivos.
El Priorat, en tierra de nadie
La comarca tarraconense del Priorat -hogar de 5.500 hectáreas de viñedos y archiconocidas bodegas- queda fuera de la red que abastece a sus territorios vecinos; es decir, que depende de las frágiles cuencas internas que dan cobertura a Barcelona y Girona.
Viñas situadas en El Lloar, el Priorat, Tarragona
Esta es una de las zonas desprovistas de infraestructuras para afrontar la actual sequía, y es por ello que la Generalitat ha anunciado recientemente otro ministrasvase para regar sus viñas. El Govern ha solicitado a la CHE llevar agua del Ebro desde Ribera d'Ebre hasta Siurana y Riudecanyes, sin suficiente agua como para hacer frente a la campaña de riego. Se prevé que esté listo para 2027.
Crece la presión por el trasvase del Ebro
Los colegios profesionales de Ingenieros de Caminos, Ingenieros Agrónomos, Ingenieros Industriales y Economistas de Cataluña, agrupados en el Observatorio Intercolegial del Agua, arropan la propuesta del trasvase del Ebro. Lo han hecho en un manifiesto presentado en el marco de una jornada en la que se ha reclamado una red hídrica “interconectada y resiliente” para todo el territorio.
Por su parte, el presidente de la Asociación Amigos del Agua, Xavier Latorre, no se define como "protrasvases", pero insiste ser "defensor de mecanismos que tengan las cuencas entrelazadas, de forma que si necesitamos agua en un lugar de Cataluña, se pueda aprovechar la que sobra en otra y al revés".
No obstante, la conexión entre el Ebro y la mermada red Ter-Llobregat una vez más no se dará, y más ahora tras los contactos entre el Gobierno y la Generalitat para activar el traslado de agua contenida en barcos desde la desaladora de Sagunto (Valencia). Este lunes, lo abordarán la ministra Teresa Ribera y el conseller David Mascort.
