Aragonès insinúa aceptar la propuesta del Gobierno de recibir agua en barcos desde Valencia
- El president pide la colaboración del Ejecutivo para trasladar recursos hídricos de cuencas y desalinizadoras que no dependen de la Generalitat
- La ministra Ribera explicará los detalles del plan al conseller David Mascort en la reunión que mantendrán este lunes
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El president de la Generalitat, Pere Aragonès, ha insinuado que aceptará la propuesta del Gobierno de trasladar agua en barcos desde Sagunt hasta Barcelona para combatir la extrema sequía que azota la comunidad, con restricciones sobre el 80% de la población.
Así lo ha asegurado en una entrevista con EFE a 24 horas de la reunión que el Govern mantendrá con el Ministerio de Transición Ecológica. Este lunes, la ministra Teresa Ribera ofrecerá al conseller de Acción Climática, David Mascort, los detalles de su plan de envío de recursos hídricos a través del Puerto de Barcelona.
"Alguna medida de emergencia tendremos que activar"
"Alguna medida de emergencia probablemente tendremos que activar, como el transporte de agua; los barcos deberán venir de cuencas que no son responsabilidad de la Generalitat, sino que son del Estado, o desde desalinizadoras que están fuera de Cataluña y, por tanto, son responsabilidad del Ministerio", ha explicado Aragonès.
A la espera de que se certifiquen opciones como la de llevar agua desde desalinizadoras como la de Sagunto (Valencia), Aragonès ha asegurado: "Actuaremos conjuntamente y con responsabilidad todas las administraciones en este momento de dificultad", ha garantizado.
En este sentido, en la reunión del lunes espera la "máxima colaboración" de la ministra para revertir los efectos de la sequía en Cataluña, con apoyo en la financiación de desalinizadoras o con barcos de agua de cuencas que gestiona el Estado o desde desaladoras de otras comunidades.
Portazo al trasvase del Ebro
Por otra parte, el presidente catalán ha rechazado de plano la propuesta de cuatro colegios profesionales de conectar la cuenca del Ebro con el sistema ATLL para trasvasar agua hacia Barcelona, porque se trata de una cuenca que también sufre sequías -aunque no en este año- y luego podría ser algo "permanente".
"Lo que se propone acabaría provocando probablemente un trasvase del Ebro, porque por mucho que se diga que es de carácter extraordinario habría un riesgo muy alto de que acabase convirtiéndose en permanente", ha alertado Aragonès.
Balones fuera ante la falta de inversones
Preguntado por la falta de inversiones en el pasado y de previsión para evitar la actual situación de escasez de agua, Aragonès ha afirmado: "Si nos ponemos a mirar atrás, aquí podríamos repartir responsabilidades entre quienes han estado más tiempo asumiendo la gestión del agua".
"Mi trabajo es mirar hacia adelante, saldremos adelante. Mirar hacia atrás no nos soluciona la sequía e interpelo a las fuerzas políticas a seguir trabajando con responsabilidad, porque el primer objetivo es superar todos juntos la sequía", ha agregado el president, que ha agradecido la disposición a colaborar del jefe de la oposición y líder del PSC, Salvador Illa.
Pide que el Gobierno colabore en la financiación de la desalinizadora de la Tordera
Aragonès ha recordado que la Generalitat ya está trabajando en medidas a medio plazo, ampliando los recursos que provienen de las desalinizadoras, con la ampliación de la de la Tordera y la nueva del Foix (Barcelona).
"Tenemos diferentes ámbitos de colaboración con el Ministerio de Transición Ecológica; hay la posibilidad de que el Ministerio colabore en la financiación de la ampliación de la desalinizadora de la Tordera y en la construcción de la nueva del Foix, que es una de las principales medidas", ha subrayado Aragonès, para después citar también los barcos de agua como una medida urgente que "probablemente tendremos que activar".
"Además, tenemos una apuesta clara por la regeneración del agua, con lo que estaremos más preparados de cara al futuro y lo haremos sin alterar los criterios europeos de que no puede haber trasvases entre cuencas", ha aseverado Aragonès.