SOS de la Cerdanya a los pijos de Barcelona
Empresarios de esta comarca, lugar de descanso preferido de la burguesía, impulsan una campaña para atraer visitantes el 6 y 7 de junio a pesar de que la frontera y la Ciudad Condal siguen cerradas
15 mayo, 2020 00:00¿Precipitada? ¿Temeraria? ¿Necesaria? La campaña Welcome Summer Cerdanya, impulsada por Empresariat Cerdanya, ha despertado recelos entre algunos vecinos de esta comarca pirenaica, que ha comenzado la desescalada por el Covid-19. El virus no ha sido especialmente agresivo en esta zona, conocida por ser el lugar de descanso preferido de la burguesía catalana, pero el sector empresarial también ha sufrido las consecuencias del confinamiento.
Por ello, comerciantes, hoteleros y restauradores se han puesto manos a la obra para revitalizar el turismo y la actividad económica mediante una iniciativa solidaria consistente en ofrecer a los visitantes que se desplacen a la comarca y paguen el túnel del Cadí la devolución del importe mediante la pernoctación en un hotel, consumir en un restaurante o acudir a un acto cultural. O bien que el establecimiento dedique esa cantidad a hacer un donativo a la Fundación Hospital de Puigcerdà.
Lema en inglés, ¿por qué?
Sin embargo, la prensa local se ha hecho eco de algunas críticas a esta iniciativa con vocación internacional --dado que el lema está escrito en inglés-- y prevista para los días 6 y 7 de junio, fechas en la que Barcelona podría seguir en la fase 0 de desescalada. Consideran que el eslogan debía ser más local.
La Ciudad Condal, a la que los vecinos de la Cerdanya llaman “nuestro barrio marítimo”, es el domicilio habitual de numerosas personas que cada fin de semana, o en período vacacional, se desplazan a sus segundas residencias. Algunas de ellas muy exclusivas, ocultas entre la magnífica vegetación de esta zona, a caballo entre Girona y Lleida. Campos de golf, estaciones de esquí … Allí tienen su mansión personajes como el futbolista Gerard Piqué, las familias Pujol, Güell y Carulla; el cazatalentos Luis Conde o la empresaria Sol Daurella, entre otros.
La frontera francesa, cerrada
Otra de las críticas que la campaña ha recibido es el hecho de que la frontera con Francia sigue cerrada, a la espera de que las autoridades europeas determinen las fechas de apertura.
Finalmente, el hecho de que el hospital de Puigcerdà no haya sufrido situaciones de colapso durante esta pandemia induce a pensar que esos donativos deberían estar dirigidos a otras asociaciones más apuradas.
“En medio de la desescalada, con un alto porcentaje de posible rebrote, poner una fecha tan próxima no deja de ser temerario, o al menos precipitado; el mensaje al consumidor no deja de asimilarse a un SOS y un síntoma inequívoco de dependencia casi absoluta de Barcelona”, escribe Juan Amaro en el diario local La Veu de la Cerdanya.
"Improvisacion"
Un vecino de Puigcerdà, que trabaja en el sector de la restauración, cree que “se trata de una improvisación, salen en estampida a buscar consumo. Sin medir consecuencias y sin una planificación inteligente que nos lleve a una recuperación quizá no tan rápida, pero sí más cuantitativa”.
Los impulsores de la campaña, por el contrario, aseguran que “llevamos más de seis semanas trabajando en este proyecto, que cuenta con el apoyo de un centenar de empresarios. Si en Barcelona no hay desescalada todavía o las autoridades sanitarias avisan de un rebrote, no pasa nada. En lugar del fin de semana previsto lo haremos el 26 y 28 de junio”, explica Francesc Armengol, presidente de Empresariat Cerdanya, a Crónica Global.
"Reactivación"
“El mensaje que queremos lanzar es doble: optimismo y demostrar que estamos preparados cuando los hoteles y los comercios abran”, añade, tras precisar que “no buscamos que 50.000 personas se concentren ese fin de semana en la Cerdanya. Queremos comenzar la reactivación, que las familias disfruten, tanto las de fuera como las residentes. Y fomentar la solidaridad”.
El empresario indica que "en su momento hicimos un llamamiento para que no hubiera desplazamientos en pleno confinamiento. Pero si hay desescalada, les esperamos". Se refiere a la fuerte polémica suscitada por el aumento de traslados a la Cerdanya durante los fines de semana de abril, que hicieron aumentar las atenciones sanitarias. Las críticas de las autoridades locales desataron una auténtica tormenta social con dosis de clasismo, pues ofendió a quienes aseguraban “dar de comer al pueblo” o proclaman que “podemos ir a las segundas residencias cuando nos dé la gana”.
Lazos de vecindad con el sur de Francia
Pero las cosas comienzan a cambiar. Respecto al lema de la campaña, recuerda que “ya tenemos un Wellcome Winter. Si el nombre ya ha calado, ¿por qué desaprovecharlo? Además, somos internacionalistas”. En este sentido, Empresariat Cerdanya ha pedido a las administraciones que reabran las fronteras y apelan a los lazos de vecindad que hay a un lado y otro. “Las familias están partidas. En todos los países hay zonas fronterizas flexibles”, afirma Armengol. Pone como ejemplo Bourg-Madame, ciudad francesa que solo dista dos kilómetros de Puigcerdà, donde trabajan vecinos de la comarca o cursan sus estudios alumnos domiciliados en esa región catalana.
Empresariat Cerdanya fue creada en mayo de 2019 a iniciativa de la Associació de Comerciants de Puigcerdà, la Associació d'Hotels i Càmpings de la Cerdanya y Cuina Pirinenca de la comarca. Su campaña cuenta con el apoyo de los ayuntamientos y del consejo comarcal, pero se trata de una iniciativa cien por ciento privada.