“Siempre ha habido machismo, también en Barcelona”
Àngels considera que a pesar de ser una ciudad “abierta y cosmopolita” la discriminación por ser mujer persiste en la capital catalana como en cualquier sitio
8 marzo, 2018 00:00Farmacéutica y con 40 años de carrera, Àngels tiene muy claro que el machismo existe en Barcelona “como en cualquier lugar del mundo”. Con 64 años asegura no haber sufrido situaciones de acoso pero sí ciertas discriminaciones por ser mujer, tanto en su ámbito laboral como en el familiar.
“En la farmacia yo era la dueña, y hace 40 años la gente entraba y preguntaba por el farmacéutico porque no creían que fuera yo”, relata. Hoy en día, considera que esto ya no ocurre, o al menos no se nota tanto. “A veces estaba el dependiente conmigo y le pedían a él las cosas, y ahí es cuando había que imponerse”.
Cosmopolita
Àngels cree que en Cataluña la situación de la mujer no es mejor que en otras ciudades. Por una parte, ve que “en Barcelona estamos muy mezclados” y esa condición cosmopolita hace que en la ciudad haya todo tipo de culturas y comportamientos”, lo cual puede ser positivo. Pero, por otro lado, reconoce: “No creo que por ser de un lugar determinado se es más o menos machista”.
A pesar de caracterizar a la Ciudad Condal como un ámbito “abierto y cosmopolita” su historia personal le hace ver que el machismo siempre ha existido, incluso en Barcelona. “De niña, yo no podía llevar pantalones al colegio y mi padre me imponía una hora de llegada, pronto, y claro que tampoco podía irme por ahí el fin de semana”, recuerda.
Pero la experiencia le ha hecho criar a su hija de otra forma. “Ella siempre ha podido opinar y decidir por sí misma”. Cuenta que “incluso nosotros le preguntábamos a qué hora iba a venir para que lo decidiera sola”. Además, explica que sus nietos tienen muñecas para jugar y que no se hacen distinciones por ser niños o niñas.
Adhesión al 8M
En relación a la manifestación de este 8M, Àngels asegura que la apoya y que su motivación principal es conseguir “la igualdad real en todos los sentidos”. Aunque no sabe si podrá participar en la marcha porque las profesoras de sus nietos hacen huelga y puede que tenga que quedarse a cuidarlos.
Para finalizar, recuerda que “quienes en el 68 estábamos en la calle tenemos que seguir saliendo, somos los mismos, porque la lucha se ha adelantado pero la igualdad real no existe aún”.