Rototom, el festival ‘reggae’ valenciano en la diana del judaísmo
El Gobierno ha llegado a condenar públicamente la decisión de los organizadores de vetar al cantante judeoestadounidense Matisyahu al negarse ha manifestar públicamente qué piensa del conflicto entre Israel y Palestina
19 agosto, 2015 13:41Rototom es un festival que cada año reúne a unas 250.000 personas en Benicassim (Comunidad Valenciana) para escuchar lo mejor del reggae internacional y participar en los eventos culturales paralelos, como el foro social o talleres que analizan cosas tan diversas como la cultura africana, “reencontrarse con la madre tierra” o acciones sociales. Este año su nombre ha llegado a la prensa internacional, pero no por la calidad del cartel. El festival está en la diana de judaísmo por su decisión de vetar a Matisyahu, un cantante estadounidense de origen judío que debía actuar este verano en el escenario castellonense.
La organización del festival no se imaginó el escándalo transnacional que propició su elección. La polémica se desató en la jornada inaugural del evento, pasado sábado 15 de agosto. La campaña Boicot, Desinversiones y Sanciones (BDS) al País Valencià anunció que cinco artistas renunciaban a actuar como señal de protesta por programar a un cantante que ha participado en “festivales pro-sionistas, ha reconocido ser un amante de Israel y ha llegado a afirmar que Palestina no existe”, según el escrito difundido.
Declaración pública de Matisyahu
El director del Rototom, Filippo Giunta, anunció en un primer momento que mantenía al hebreo en el cartel e intentó aplacar la polémica al asegurar que las opiniones de Matisyahu pertenecían a su “ámbito privado” y no implicaba que la organización las compartiera. Las quejas pasaron del colectivo a los asistentes al festival y se movió ficha de forma poco pulcra. El artista la difundió en su página de Facebook.
Matisyahu, seguidor del judaísmo jasídico (interpretación ortodoxa y mística), manifestó que los organizadores se habían puesto en contacto con él por "las presiones del movimiento BDS” y que le solicitaron “escribir una carta o gravar un vídeo en el que me pronunciaría sobre mis posiciones respecto al sionismo y el conflicto entre israelís y palestino para pacificar a la gente de BDS”. Algo en el que se negó: “Yo apoyo la paz y la compasión para todo el mundo. Mi música habla por si misma y nunca he hablado de política en ella”.
Una insistencia “espantosa y ofensiva”
“La música tiene el poder de transcender el intelecto, las ideas y políticas y unir a la gente en el proceso”. El rapero apostilló que la organización “insistió” en que clarificara sus puntos de vista personales. Algo que adjetiva como “espantoso y ofensivo” por ser el único artista del festival al que sele pedía que rindiese cuentas políticamente.
Tras esta declaración, el festival le vetó y la presión estalló.
Acusación de antisemita
El Congreso Mundial Judío de Nueva York manifestó su “perplejidad” e “indignación” del Rototom y le acusó de “antisemita”. Una palabra que ha corrido como un reguero de pólvora en las organizaciones hebreas mundiales. Incluso el de la embajada de Israel en España, que publicitó lo mal que ha sentado en el país la expulsión. A este pronunciamiento le siguió el de la embajada de Estados Unidos. Consideró "preocupante" la actitud de la organización del festival.
El Gobierno central tuvo que reprobar públicamente el veto (existe un comunicado de Exteriores), y ha aplacado las quejas de los Ejecutivos hebreo y estadounidense. No la de la prensa israelí, que mantiene las críticas al Rototom.
Declaración pública
Sus protestas han tenido eco. Tanto, que Giunta también suspendió una rueda de prensa que había convocado para este miércoles para explicar la polémica. El festival ha preferido emitir una declaración pública por escrito que lanzarán “en breve”.
Matisyahu actuará la noche de este miércoles en Frankfurt (Alemania).