Así es la cascada natural más alta de Cataluña: ruta ideal para el fin de semana a menos de 2 horas de Barcelona
- Uno de los saltos de agua más bonitos y fascinantes del territorio catalán ubicado en un insólito paraje
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Descubrir rutas de naturaleza en Cataluña es una de las experiencias más gratificantes que se pueden vivir en esta región, ya que ofrece una increíble variedad de paisajes y ecosistemas. El territorio catalán nos gusta mucho porque, además de su rica historia y cultura, es un paraíso para los amantes de la naturaleza, con montañas, bosques y parques naturales que invitan a ser explorados.
Lo que realmente nos atrae de estos itinerarios es la sensación de desconexión que nos brindan. Al caminar por estos paisajes, nos sentimos en calma mientras nuestros pulmones se llena de aire limpio.
El mayor salto de agua de Cataluña
El salto de Sallent es el mayor salto de agua de Cataluña con una caída libre de unos 115 metros. Está localizado en la riera de Rupit, en la comarca de Osona, al norte de la provincia de Barcelona. La riera es un afluente del río Ter por su lado izquierdo, que nace de un conjunto de fuentes y torrentes originados en las zonas altas de la sierra de Collsacabra.
El salto es, prácticamente, vertical y separa el Collsacabra de las Guillerías. La bajada se divide en dos partes de unos 50 metros cada una, con líneas de rápeles a la derecha de la cascada.
La riera, desde la sierra de Collsacabra, empieza a tomar forma después de cruzar el puente de los Tres Ojos, en el molino del Soler, donde forma una poza. Sobre la riera hay un puente colgante que fue construido en el año 1945 y reconstruido en el 1994, bajo el cual se pasa.
Después de cruzar el pueblo de Rupit, la cascada del Rodó y la Pomareda, se despeñan desde lo alto del risco formando el salto de agua. Y bajo él se forma la garganta del Diablo siguiendo el arroyo hasta desembocar en el embalse de Susqueda.
Cómo llegar
La forma más sencilla de acceder a la zona es salir desde el pueblo de Rupit, ya que se encuentra en ese término municipal y pasar por debajo del puente colgante que cruza la riera. Después de la iglesia, dejando atrás las casas, se ha de seguir por una pista hasta la fuente de 'Carraguell', llegando al puente de la Sala (un puente de piedra medieval que comunica con Cantonigrós). Para continuar, desde allí por el camino que bordea la riera de Rupit, se ha de pasar por la fuente de la Pomareda y, al cabo de unos quince minutos, llegarás a los riscos donde se encuentra este maravilloso salto de agua.
¿Por qué nos gusta tanto disfrutar de las cascadas?
Las cascadas transmiten una profunda sensación de paz y tranquilidad, gracias al sonido relajante del agua cayendo. Este sonido constante y suave puede tener efectos terapéuticos, reduciendo el estrés y la ansiedad y generando una atmósfera de calma. Estar cerca de una cascada nos conecta con la naturaleza, evocando sentimientos de asombro y respeto ante la majestuosidad del entorno natural. Su presencia nos recuerda a la belleza y a la perfección del planeta, invitándonos a reflexionar sobre nuestra relación con él y a sentirnos más en armonía con el mundo que nos rodea.
Al mismo tiempo, estos saltos de agua nos transmiten una sensación de energía y renovación única. La fuerza con la que el agua fluye nos inspira a liberarnos de tensiones emocionales y a sentirnos revitalizados. También, simbolizan el movimiento y la transformación, invitándonos a soltar lo que nos limita y abrazar el cambio.