Los tiempos de Piqué y ciberchantaje a la Generalitat

El fallecimiento de Josep Piqué da pie a decenas de artículos, semblanzas y hasta ajustes de cuentas. Su desaparición acentúa de manera descarnada que la política ha caído dramáticamente de nivel. Piqué, empresario y político, representaba una manera de dedicarse a las actividades públicas que está en franco proceso de extinción. Hombre afable, abierto, amable, de formas exquisitas, altura intelectual y notable capacidad analítica. Es decir, todo lo contrario de la hornada de políticos que dieron forma al proceso independentista y de gran parte de los que se opusieron.

En su trayectoria pública no hubo salidas de tono o declaraciones desafortunadas sino contención, mesura, pausa y habilidad. El catalán de Aznar, como fue conocido durante sus años de ministro y de presidente del PP en Cataluña, ejemplificaba a la perfección los valores que se asociaban a la política como una manera de alcanzar pactos y establecer consensos. De modo que estaba cantado que los cambios de paradigma, los populismos, el cortoplacismo y el analfabetismo se lo llevarían por delante. Pero él dejó la política cinco minutos antes de que los bárbaros sin corbata tomaran las instituciones y se pasearan por los parlamentos exhibiendo con orgullo su adanismo y su oceánica banalidad.

El contraste es tan acusado que causa impacto. En La Vanguardia, Marius Carol traza un sentido elogio de la figura pública de Piqué, de quien fue amigo y vecino en Urús, y destaca que también fue portavoz del Gobierno de Aznar: "Con José Maria Aznar estuvo al frente de tres ministerios e incluso compaginó el cargo con la portavocía del Gobierno. Creo que es el mejor portavoz que ha tenido ningún Gobierno de España. Serio, riguroso y veraz, pocas veces quien ha ocupado este cargo ha conseguido el respeto generalizado de los medios de comunicación. Sin embargo, su pasión era la política exterior. Él quiso modernizar las embajadas, convirtiéndolas en plataformas para el desarrollo económico, y puso en marcha el Plan Asia, en un intento del poner el acento del mundo empresarial español en un continente entonces emergente".

Portada de 'La Vanguardia' el 7 de abril de 2023 / Kiosko

El exdirector de La Vanguardia también da cuenta de los últimos días de Piqué: "Llevaba tiempo que no se encontraba bien por una de esas malditas enfermedades que te debilitan las defensas por lo que incluso un resfriado se convierte en un problema. Sin embargo, no había bajado su actividad, a pesar de la leucemia crónica. Ya no hacía jogging, pero intentaba mantenerse en forma, sin forzar, con los aparatos de gimnasia de su piso de Madrid. En noviembre se desplazó a Japón por cuestiones profesionales y regresó muy desmejorado. Pero, de nuevo se recuperó. Coincidí en un par de ocasiones con él desde entonces: la última hace tres semanas, en la reunión del consejo asesor de La Vanguardia, y aunque estaba casi sin voz, forzó sus cuerdas vocales para darnos una brillante lección de geopolítica, aunque más prudente estuvo con la realidad española. Quizás porque Alberto Núñez Feijóo lo había recuperado para su think tank y quería conocer mejor sus planes. Se conocían bien con el ex presidente de la Xunta, pero además el hotelero Amancio López -un gallego asentado en Barcelona- los sentaba siempre que tenía ocasión a la mesa porque era amigo íntimo de ambos y sabía que se necesitaban".

Ayer también falleció Juanjo Ferreiro, uno de los fundadores del PSC y al que recuerdan en La Voz de Galicia en los siguientes términos: "Hoy jueves, cinco días después de cumplir 79 años, ha muerto Juan José Ferreiro Suárez, uno de los históricos fundadores del Partido Socialista de Cataluña (PSC). Ferreiro nació en Lugo y a los 20 años se trasladó a Barcelona, donde empezó a trabajar en una fábrica de automóviles. Dos años después, en 1966, ingresó en Comisiones Obreras. Arranca entonces una trayectoria política que durante el franquismo se desarrolló en la clandestinidad. Fue detenido tres veces y despedido de varias empresas por su militancia sindical. Su trayectoria le llevó a Convergència Socialista de Catalunya, organización desde la que contribuyó de forma decisiva a la fundación del PSC en 1976".

También falleció ayer la señora Mercè Navarro, propietaria del restaurante Roig Robí. Del texto de la crítica gastronómica de La Vanguardia Cristina Jolonch: "El Roig Robí, que sigue siendo un referente de la restauración en la ciudad, ha logrado sobrevivir con buena salud en una ciudad que fue diciendo adiós a casas tan destacadas como Reno, Azulete, Finisterre, Neichel, Florian o Jean Luc Figueras, entre tantas otras. Pero el Roig Robí, en la Calle Séneca, sigue ahí, imperturbable, con el agradable jardín, que a ella le encantaba contemplar desde la frondosa y plácida terraza de su vivienda, justo encima del restaurante".

Más noticias. Los datos médicos de miles de ciudadanos y toda clase de información del personal sanitario del Hospital Clínic están en manos de una banda de ciberdelincuentes que tras el ataque de los Mossos a su sitio en el internet oscuro amenaza con desvelar ensayos de fármacos y la identidad de pacientes con enfermedades infecciosas. "El grupo RansomHouse anima a los usuarios del hospital a denunciar la pérdida de su información días después de que los Mossos bloquearan el acceso al contenido robado en Internet", apunta al respecto El País. Escribe Bernat Coll: "El grupo de ciberdelincuentes RansomHouse, que robó hace un mes 4,5 terabytes de datos personales al hospital Clínic, amenaza ahora con filtrar información personal de pacientes “con enfermedades infecciosas” dos días después de que los Mossos d’Esquadra bloquearan el acceso al contenido robado en Internet. En su contraataque, los hackers animan además a los usuarios del centro hospitalario a denunciar la pérdida de sus datos personales. “En los próximos días habrá cambios que gustarán a muchos pero no a la policía”, amenaza el grupo de hackers a través de Telegram como respuesta a la acción policial. Los agentes atacaron el pasado viernes el portal extranjero desde donde se distribuía la información después de que los ciberdelincuentes destaparan el 30 de marzo una primera pequeña parte de los archivos identificativos y de salud de pacientes, trabajadores y proveedores robados".

Portada de 'El País' de 7 de abril de 2023 / Kiosko

Estos criminales exigen 4,2 millones de euros a la Generalitat.

En El Confidencial, Antonio Fernández firma un análisis sobre la desalentadora actividad política que confirma lo dicho antes sobre las formas de Piqué y los tiempos actuales. "La degradación de la política catalana: cómo hacer imprescindible la amenaza y el insulto", titula su pieza, que arranca así: "La degradación de la política catalana está llegando a límites alarmantes. Insultos y amenazas físicas entre rivales políticos protagonizan el día a día de la actualidad política que hace un par de décadas pasaba por ser una de las colectividades más civilizadas de Europa. Eran tiempos del oasis catalán. Hoy, de ese oasis no quedan ni las palmeras. La caballerosidad de los políticos del extremo nordeste de España ha dado paso a la crispación, el insulto y la intransigencia. El ejemplo que mejor ilustra esta nueva hornada de políticos de insulto fácil es el del exconsejero de Empresa Josep Huguet (ERC), que destacaba una noticia de TV3 sobre la exconsejera Clara Ponsatí, quien había vuelto a Barcelona y había declarado: “No he venido a hacer ningún pacto con el Estado, sino a denunciar la vulneración sistemática de nuestros derechos”. El republicano emitió un comentario ácido: “Ahora que ya no irá a prisión. Haciéndose la valiente desde el simbolismo fake”. Inmediatamente, el exlíder de la CUP en el Parlament, Antonio Baños, le respondió: “Eres un mierda, Huguet”. El propio jefe de la Oficina de Puigdemont, Josep Lluís Alay, alto cargo del Govern, publicó un pequeño vídeo de la detención con una palabra altisonante: “Escoria”, sin focalizar esa palabra en nadie".

Y: "La apreciación del cupero, no obstante, puso en marcha una cascada de insultos a cada cual más grosero y violento. “Ni eso: un medio-mierda”, recitaba Lluís Checa, uno de los acólitos que se sumaban al recital. “Un mierda y un traidor”, lanzaba Montserrat Sagarra. “Muy mierda”, añadía Jaume. “Tenemos demasiados hijos de puta entre nosotros”, terciaba Josep Girona. “Cuánto FDLGP [Fill de la gran puta, uno de los insultos más repetidos en todos los terrenos] tenemos en Cataluña. ¡¡Lot of shit!!”, clamaba Xavier. Son sólo algunos ejemplos de la cohorte extremista que ha dado forma a un sector maniqueo e intransigente que se ha adueñado de la política catalana. Esa crispación es la que llevó al cómico Toni Albà a llamar (esta semana) Patufet al presidente catalán, Pere Aragonès".

Ese es el nivel. 

Ayer fue noticia que Jaume Peral ha sido cesado como director general de RAC 1. Y que Joan Laporta ha enviado sendas misivas a la UEFA y a la FIFA en las que pide "paciencia" sobre el caso Negreira. Del texto de El Periódico: "Según informa Catalunya Ràdio, el dirigente azulgrana habría solicitado tanto a Alexander Ceferin, presidente de la UEFA como a Gianni Infantino, presidente de la FIFA, que eviten prejuzgar al Barça y su actuación en la supuesta compra de favores arbitrales. Laporta exige que sean responsables y no se sumen al escarnio público que está sometido el Barça desde hace semanas.

Según la misma información, el presidente del Barça también solicita a ambas entidades que esperen a que se pronuncie la Justicia antes de emprender posibles medidas contra la entidad azulgrana".

7 de abril. Viernes Santo. Santoral: Juan Bautista de la Salle, Aiberto, Caliopio, Enrique Walpole, Hegesipo, Hermano José, Jorge de Lesbos, Pedro Nguyen Van Luu y Pelusio.