¿Quién manda ahora en la ANC y Òmnium?

¿Quién manda ahora en la Assemblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium Cultural? La entrada en prisión preventiva de Jordi Sánchez y Jordi Cuixart por presunta sedición ha dejado a dos activistas sobrevenidos al timón del llamado independentismo civil, el frente callejero del Gobierno catalán.

En la primera de las entidades, Agustí Alcoberro Pericay ha tomado la portavocía de la entidad heredera de la antigua Plataforma pel Dret a Decidir (PDD), y que ha protagonizado manifestaciones con notable concurrencia en las últimas Diadas, aunque con asistencia menguante con el paso de los años.

Sector duro

Si a primera vista el relevo de Alcoberro parece natural —es vicepresidente de la ANC desde el sábado, cuando Natàlia Esteve dimitió por motivos personales—, su nombramiento tiene otros ángulos. El doctor en Historia Moderna por la Universidad de Barcelona (UB) es considerado del sector duro de la asociación, el menos cercano a Sánchez.

De hecho, en la elección para comandar la dirección de la Assemblea, un secretariado de 75 miembros, se impuso a Àngels Folch, una profesora de Sabadell considerada próxima al hasta ahora presidente y, por ende, con línea directa y fluida con el Palau de la Generalitat, sede del Govern.

Los vicepresidentes de la ANC y Òmnium Cultural, Agustí Alcoberro y Marcel Mauri / EFE

Agustí Alcoberro (ANC), junto a Marcel Mauri (Òmnium) en Barcelona el martes / CG

Alcoberro militó en el PSAN-P, una formación independentista partidaria del terrorismo violento para derrocar al franquismo, primero, y golpear a la democracia en España, después. De hecho, fue detenido el 26 de octubre de 1975 y vivió la muerte del dictador desde el interior de la cárcel Modelo.

En la retaguardia, el también exdirector del Museo de Historia de Cataluña (2008-14) estará flanqueado por los nueve miembros del comité permanente del secretariado, en los que los equilibrios para contentar a las bases y al president Puigdemont apenas se mantienen tras la declaración de independencia suspendida en el Parlament del martes 10 de octubre.

ERC al control

Menos dudas sobre la secesión catalana y cómo llegar a ella existen en la melliza Òmnium Cultural. Con el empresario Jordi Cuixart en custodia preventiva en Soto del Real, el periodista Marcel Mauri ha tomado el relevo como cara visible de la que a priori se fundó como una entidad de promoción de la lengua y cultura catalanas.

Mauri, ex jefe de comunicación del Ayuntamiento de Badalona cuando Guanyem Badalona en Comú (CUP) trenzó una extraña alianza para desplazar a Xavier Garcia Albiol (PP) de la alcaldía, pasó a ser asesor especial de Oriol Junqueras en la vicepresidencia de Economía el pasado 6 de septiembre.

El especialista en comunicación —y profesor agregado en la Universidad Pompeu Fabra (UPF)— ha sido aupado en una asociación que ya es casi monocolor republicana y descentralizada.

Òmnium funciona con proyectos pseudoprogresistas (Lluites Compartides o Crida per la Democràcia son dos de ellas) cuyo objetivo es arañar adeptos en la frontera de voto entre ERC y los comunes.

Mauri, visionario de este aperturismo en Òmnium, una entidad creada en 1961 por prohombres de la burguesía catalana, ya pregonaba en 2012 la necesidad de extender los tentáculos del independentismo más allá de sus fronteras naturales: hacia la izquierda.