La Generalitat se mete en otro lío: permite llenar "piscinas privadas" si se abren a todo el mundo
La decisión sobre qué piscinas se podrán llenar con agua de boca recaerá sobre los ayuntamientos y las condiciones en que se abrirán al público
16 abril, 2024 13:07Noticias relacionadas
El Govern de la Generalitat relaja las restricciones contra la sequía tras superar el 18% de capacidad en los embalses de las cuencas internas de Cataluña y ante un verano especialmente caluroso. En el Consell Executiu de este martes, Pere Aragonès ha abierto la mano a que se rellenen las piscinas privadas que pierdan agua durante el verano, pero la fórmula por la que han optado los republicanos genera otro lío en la fase final de su mandato.
De forma oficial aseguran que han reformulado el concepto de "refugio climático", que abren la mano a limitar el consumo de agua de los establecimientos hoteleros y la regulación de las desalinizadoras portátiles para uso privado.
Cómo se abren las piscinas a los privados
En la práctica, el decreto que han presentado indica que las piscinas públicas y privadas podrán llenarse con agua de boca si el ayuntamiento del municipio la considera "refugio climático" y se abre a la población general. Y esta segunda parte es indispensable, aunque la definición de cómo las comunidades de vecinos o los propietarios de casas con piscinas incorporan a otras personas ajenas a la propiedad del edificio queda en el aire. De hecho, la Generalitat ha pasado la patata caliente a los municipios.
Según la portavoz del Govern, Patrícia Plaja, las piscinas de comunidades de vecinos, instalaciones deportivas u hoteles y campings podrán solicitar a su ayuntamiento convertirse en refugios climáticos. Sólo cuando adquieran esta categoría podrán usar el agua de boca para rellenarlas.
La republicana indica que también se contempla que la petición se pueda cursar en caso de casas privadas, aunque sólo "en casos concretos". Como que sea la única piscina del municipio, según la explicación del Ejecutivo catalán.
Responsabilidades delegadas
En todo caso, serán los propietarios de las instalaciones y el ayuntamiento correspondiente los encargados de negociar la inclusión de cada piscina en el registro que habilitará la Generalitat. "La toma de decisión dependerá de los ayuntamientos porque son ellos los que conocen las necesidades y casuísticas de cada población", ha defendido Plaja, quien ha apelado al "sentido común" de cada regidor.
La portavoz ha admitido que no se han trasladado directrices a los gobiernos locales sobre como determinar cuantas piscinas pueden ser catalogadas como "refugio climático", si la entrada deberá ser gratuita o de pago, si serán necesarios los socorristas, si los municipios de playa necesitan piscinas llenas o sobre quien recaerá la responsabilidad en caso de posibles accidentes o mal uso de las instalaciones.
Hoteles de lujo
"La piscina del Hotel Majestic es la última de nuestras preocupaciones", ha dicho Plaja al ser preguntada sobre si hoteles de lujo como este del paseo de Gràcia de Barcelona podrán declararse "refugio climático" y cobrar el precio que quieran determinar a los ciudadanos que entren a bañarse, como una forma más de negocio.
La portavoz ha incidido en que la preocupación del Govern son "las personas que viven en pueblos sin acceso a la costa y que tienen dificultades para pasar su día porque se asfixian de calor en casa", por lo que ha considerado que se trata de una cuestión "prácticamente de salud pública". Sin embargo, ha asumido que los hoteles que no terminen llenando sus piscinas serán "pocos", ya sea por la contratación de desalinizadoras privadas o por la categorización de "refugio climático".
Tope de consumo al turismo
Respecto al resto de medidas para hacer frente a la emergencia por sequía que vive Cataluña, el Govern en funciones también ha fijado un tope específico de consumo máximo para establecimientos turísticos. Tanto hoteles como apartamentos.
Sólo podrán usar 100 litros de agua por plaza en fase de emergencia. ERC argumenta que esta cantidad es equivalente al consumo doméstico del resto de ciudadanos. Eso sí, ese umbral para el turismo será obligatorio solo en municipios donde, durante tres meses, se superen las dotaciones máximas contando todos los consumos (200 litros por habitante y día en fase de emergencia), un límite que por ejemplo no supera la ciudad de Barcelona.
Cuando se apruebe el decreto ley que se ha presentado este martes, será de obligado cumplimiento inmediato Barcelona y Girona.