Carrizosa (Cs) acusa al PSC de complicidad con el nacionalismo: "Al final ha quedado Illa ayudando a Aragonès"

Ciutadans encara las elecciones del próximo 12 de mayo en Cataluña con el propósito de recuperar a parte del electorado del PSC decepcionado con la anuencia de los socialistas con Govern de ERC en Cataluña en los últimos años y los acuerdos del PSOE con los partidos secesionistas en el Congreso. Así se desprende de la comparecencia del portavoz de Cs en el Parlament, Carlos Carrizosa, al conocerse el adelanto electoral en la autonomía después de que los Presupuestos de la Generalitat pactados por ERC y PSC no hayan salido adelante.

"En la foto final de la legislatura ha quedado Illa, el supuesto jefe de la oposición, prestándole ayuda a Aragonès en unos Presupuestos que eran continuistas en lo económico, que ha sumido estos últimos años a Cataluña en la decadencia económica, y con el procés", ha manifestado el diputado de Ciutadans, en alusión al "cambio" que dice representar Illa, a quien Carrizosa acusa de "continuismo absoluto de ERC".

El dirigente constitucionalista considera que Cataluña necesita dar un giro total a las políticas de la Generalitat de los últimos años, marcados por iniciativas identitarias como la lengua catalana y, ahora, la falta de agua.

"No es que Cataluña tenga que pasar página, como dice Illa, es que no puede seguir pasando las páginas del mismo libro", ha manifestado. "Aspiramos a gobernar Cataluña de otra forma. Vamos a por todas", ha añadido.

Críticas a Erra por permitir el voto delegado de Lluís Puig

Carrizosa, por otra parte, ha dedicado parte de su discurso a denunciar las ilegalidades y lo que considera abusos de poder de los mandatarios nacionalistas. Algo para lo cual ha puesto como ejemplo la decisión de la presidenta del Parlament, Anna Erra (Junts), de aceptar el voto delegado de Lluís Puig (Junts), fugado de la justicia en Bélgica por el procés. En este sentido, ha recordado que, de no haberse contado el suyo este miércoles, la votación sobre los Presupuestos habría acabado en empate a 67.

El dirigente de Cs, asimismo, ha marcado distancias tanto con el PSOE como con el PP por "sus casos de corrupción", y se ha mostrado "muy orgulloso de la trayectoria de su partido".