Izquierda Española ha cuestionado la imposición de la inmersión monolingüe obligatoria en catalán en el sistema educativo de la Generalitat de Cataluña, así como el despido por parte del Ayuntamiento de Barcelona de un clarinetista sevillano de su banda municipal y de un cocinero cordobés del consistorio por no tener el nivel que la Administración autonómica exige de este idioma.

"La izquierda debe defender la igualdad frente a la discriminación lingüística, educativa y laboral", ha manifestado Guillermo del Valle, abogado y líder de este nuevo partido progresista tras reunirse en Barcelona con destacadas figuras del constitucionalismo catalán. Entre ellas, la presidenta de Asamblea por una Escuela Bilingüe (AEB) y miembro de Escuela de Todos, Ana Losada y el presidente de Impulso Ciudadano, José Domingo. Un encuentro al que también ha acudido el padre de un alumno de Canet de Mar acosado desde el nacionalismo por haber conseguido judicialmente un 25% de clases en castellano para el aula de su hijo.

"Igualdad de derechos" 

Del Valle ha expresado su "apoyo y agradecimiento a las organizaciones comprometidas con la igualdad y los derechos de ciudadanía frente a las imposiciones nacionalistas", según explica la formación progresista en un comunicado.

"No se puede justificar la discriminación de ningún conciudadano por razones etnolingüísticas" ha afirmado Del Valle, añadiendo que "aún es más escandaloso si quien lo justifica son la izquierda oficial y los sindicatos, abandonando a su suerte a muchos trabajadores", en alusión al despido de un cocinero cordobés del Ayuntamiento de Barcelona y de clarinetista sevillano de su banda de música municipal por no tener el nivel C1 de catalán.

El monolingüismo, "barrera adicional" para los más vulnerables

"No hay lenguas propias e impropias. Es un peligroso relato nacionalista contra lo común, que sirve para recortar derechos y discriminar a una parte de la ciudadanía", ha añadido.

Según Del Valle -que aspira a presentarse con Izquierda Española a las elecciones europeas del próximo junio-, "la discriminación lingüística tiene un componente de segregación sobre las clases trabajadoras y sobre buena parte de la población inmigrante, que encuentra barreras adicionales que agravan su situación de vulnerabilidad".

Ven doble rasero de los dirigentes nacionalistas con la inmersión

Por lo que respecta a la inmersión lingüística que la Generalitat impone desde hace tres décadas en las escuelas de Cataluña, el líder de Izquierda Española ha recordado que "se debe garantizar la escolarización en la lengua común, el español, que es la que nos iguala a todos los ciudadanos".

"La oligarquía nacionalista utiliza la lengua como instrumento de separación política y dominación social, mientras escolariza a sus hijos en centros privados sin inmersión. El nacionalismo avanza en su proyecto reaccionario, con un gran coste en términos sociales y de igualdad. El sistema de inmersión es lesivo para los menores por razones pedagógicas y educativas. Y lo es especialmente para los más débiles", considera Del Valle.

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