El Govern acaba de anunciar que endurecerá la inmersión en los colegios catalanes mediante un despliegue normativo y de inspectores que fiscalizarán el proyecto lingüístico que se lleva a cabo en los centros. Sin embargo, los altos cargos de la Generalitat no predican con el ejemplo, pues han optado por escuelas concertadas o privadas donde se aplica el multilingüismo, esto es, donde el catalán no es la lengua vehicular. Se trata de los colegios Frederic Mistral de Barcelona, Montessori Palau de Girona y Liceo Italiano, donde el abanico lingüístico es muy amplio y, por tanto, ofrece más oportunidades que el modelo de escuela pública que defiende el Ejecutivo autonómico.
Ante esta contradicción, portavoces del Govern precisan que se trata de “datos personales de estas personas que, además, afectan a menores que en ningún caso deberían publicarse e involucrarlos en polémicas políticas”. Hay que recordar que fue el consejero Josep González-Cambray quien convirtió la escuela de Canet de Mar (Barcelona), donde se ha aplicado el 25% de horario lectivo en castellano después de que la propia consejería ejecutara la resolución del Tribunal Supremo, en escenario de su supuesta desobediencia.
Cambray se desplaza a la escuela de Canet
Cambray se desplazó, rodeado de cámaras, a este centro para reunirse con los profesores y padres. Cambray, al igual que la portavoz del Govern, Patrícia Plaja, lleva a sus hijos a un centro donde el catalán no es lengua vehicular. El presidente Pere Aragonès estudió en un colegio también multilingüe, al igual que el presidente de ERC, Oriol Junqueras. De hecho, tal como publicó este medio, una encuesta demuestra que los votantes de ERC, Junts per Catalunya (JxCat), CUP y En Comú Podem rechazan la enseñanza monolingüe.
Esta es la relación de los centros elegidos por los altos cargos. Con la finalidad de preservar la intimidad de los menores, Crónica Global ha optado por no relacionar nombres de altos cargos y escuelas.
La Escuela Montessori Palau de Girona, según indica en su página web, “respeta la teoría de la lengua materna y promueve el aprendizaje del catalán, castellano, inglés y alemán ya desde educación infantil y el francés se añade a partir de secundaria. El centro ofrece más horas de lenguas extranjeras y se trabaja en grupos reducidos y profesores nativos. Además, en algunas materias se utiliza el inglés como lengua vehicular”.
Gran capacidad plurilingüe
El proyecto lingüístico del Montessori Palau Girona “ofrece los idiomas no como materia extraescolar, sino integrándolos como parte del aprendizaje diario del alumno en cada una de sus etapas educativas. En todos los cursos se prepara a los alumnos para que sean hábiles en tantos idiomas como sea posible, procurando potenciar las sinergias que existen entre lenguas, con el objetivo de desarrollar una gran capacidad plurilingüe e intercultural. Por este motivo, el número de idiomas que se enseñan desde educación infantil hasta el último curso de secundaria son seis”.
En cuarto, quinto y sexto de primaria, el catalán y el castellano se alternan como vehicular cada 15 días, mientras que el inglés se imparte cinco horas a la semana y el alemán, una hora. En secundaria no hay cambio.
El Frederic Mistral es un colegio en el que se imparte infantil y primaria que está integrado en la Fundació Collserola, que incluye el instituto Tècnic Eulàlia, situado igualmente en Barcleona, y las escuelas Avenç (Sant Cugat del Vallès) y Ramon Fuster (Bellaterra). Estas dos últimas ofrecen plazas hasta la ESO, el bachillerato lo integran en el centro de secundaria de la capital catalana.
El grupo educativo se reivindica como catalanista y laico desde su fundación, pero ha apostado por el multilingüsimo. El castellano supera el 25% mínimo que fija el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, ya que desde primaria --los programas educativos de infantil no están tan regulados-- se usa en más clases que el de Lengua Castellana propiamente dicha. Lo mismo ocurre con el inglés, la tercera lengua que se imparte desde los primeros años de escolarización.
Cuarta lengua
Los responsables de la Fundació Collserola introducen la cuarta lengua en los programas lectivos a partir de los 10 años. Entonces, las familias deben elegir si sus hijos empiezan a aprender o francés o alemán. No es una decisión que se tome de forma unilateral, los educadores recomiendan qué camino debe seguir el pequeño según sus capacidades. Eso sí, esta cuarta lengua solo se imparte de arranque en las horas lectivas destinadas a este fin. Si el alumno responde de forma correcta, se amplía. Incluso se fomenta desde el centro de programas internacionales para fomentar esta formación.
El Liceo Italiano es otro de los centros elegidos por altos cargos independentistas que defienden la inmersión. Aunque, de nuevo, en él el catalán no es la lengua vehicular. El catalán se ve reducido a una asignatura testimonial en primaria, siendo el italiano y el inglés los idiomas predominantes, también en cursos más elevados.
Exdirigentes catalanes que han defendido la inmersión, como los expresidentes Artur Mas y José Montilla, también enviaron a sus hijos a escuelas de pago donde el catalán no era vehicular.