Pancartas partidistas en la fachada de la Generalitat de Cataluña antes de las fiestas navideñas de 2023

Pancartas partidistas en la fachada de la Generalitat de Cataluña antes de las fiestas navideñas de 2023 @carrizosacarlos (TWITTER)

Política

'Patinazo' de la Generalitat con el castellano en la web de su certificado digital

El proceso de inscripción del IdCat deja palabras sin traducir y contiene algunas faltas, como ya ocurrió con anterioridad en otras webs y comunicaciones del Govern en este idioma

10 enero, 2024 18:35

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La Generalitat de Cataluña vuelve a ser noticia por su falta de rigor ortográfico en la versión en castellano de algunas de sus páginas web. Esta vez, en la dedicada a obtener su certificado digital, el llamado IdCat.

Su proceso de inscripción contiene una falta de ortografía cuando se accede a la parte de rellenar los datos de contacto. Así lo han denunciado usuarios en redes sociales, que advierten de que aparece el siguiente mensaje: "Atenció! A continuación es posible que el navegador os pida si voléis guardar o abrir el fichero. Por favor hagáis clic a guardar". Es decir, tres faltas en apenas tres frases.

Precedentes

No es la primera vez que ocurre algo así, pues en los últimos años han habido numerosos casos similares. Así lo ha evidenciado, por ejemplo, Asamblea por una Escuela Bilingüe (AEB), que en el pasado publicó en su web algunos de ellos, como uno de la web de la Consejería de Salud del Govern secesionista. En su caso, tres en cuatro frases -caso de la ausencia de un interrogante al iniciar una pregunta, confundir el verbo "hacer" con "acero" o dejar sin traducir algunas palabras, como "m'avisarà", tal como puede apreciarse en el tuit bajo estas líneas.

Esta misma entidad defensora del bilingüismo también denunció en 2019 otros errores similares en otros textos oficiales de la Generalitat traducidos al castellano. Tal fue el caso de unos padres del Baix Llobregat que recibieron una carta de la directora de los Servicios Territoriales de la Consejería de Educación, en la cual se incluían párrafos enteros sin traducir, además de faltas ortográficas como omitir tildes, confundir el verbo "tuvo" por "tubo" o "cambio" por "canvio", entre otras.

Paralelamente, la Generalitat de Cataluña impone unas exigencias lingüísticas muy rigurosas al obligar a tener el nivel de catalán C1 o C2 para acceder a puestos de trabajo público en la autonomía, como por ejemplo docentes y sanitarios, entre muchos otros. Y se ha mostrado implacable con algunos de ellos por haberse mostrado críticos con esa exigencia, como ocurrió el año pasado con una enfermera andaluza asediada por los nacionalistas y criticada por el conseller de Salud, Manel Balcells, por haberse quejado en sus redes sociales de tener que obtener ese nivel C para poder optar a tener plaza fija. Semanas después, el hospital público barcelonés en el que trabajaba no le renovó su contrato.