ERC no se conforma con la ley de amnistía: exige que el 1-O no se considere delito

ERC no se conforma con las prebendas que el Gobierno en funciones parece dispuesto a conceder a los partidos secesionistas catalanes a cambio de obtener su apoyo a la investidura de Pedro Sánchez (PSOE) como presidente. A la formación secesionista le sabe a poco la elaboración de una ley de amnistía para los condenados y encausados por el procés: ahora, además, exige que la causa del referéndum ilegal y unilateral del 1 de octubre de 2017 no se considere delito, a pesar de las sentencias judiciales que han dictado todo lo contrario.

En concreto, ERC ve inaceptable que en la exposición de motivos de esa ley de amnistía el PSOE intente que conste el carácter "delictivo" del referéndum ilegal del 1-O para no cuestionar la sentencia del Tribunal Supremo (TS), que condenó por sedición, malversación y/o desobediencia a los organizadores de la votación ultranacionalista, según informa El Nacional.

Más financiación y más competencias

Esta reacción se produce justo en el momento en que Círculo de Economía ha expresado su apoyo a la amnistía que negocian el PSOE, ERC y Junts, siempre y cuando se ajuste a la legalidad y pase por la “aceptación por los beneficiarios del marco establecido por la Constitución”, renunciando a la "unilateralidad" que supuso el 1-O.

A día de hoy, ERC escenifica su presión a los socialistas indicando que el acuerdo con ellos está lejos, añadiendo además otras demandas: entre ellas, dar aún más financiación autonómica a la Generalitat de Cataluña; más cesiones de competencias a ésta, como el traspaso total de la red de Cercanías (Rodalies) de Renfe; y afrontar lo que llaman "conflicto político entre Cataluña y España", aludiendo con esta terminología al que en realidad mantienen los dirigentes nacionalistas de Cataluña.

Condonación de la deuda de la Generalitat

Sobre este último punto, ERC pretende crear una comisión de seguimiento de los acuerdos de la denominada "mesa de diálogo" entre el Gobierno español y los dirigentes secesionistas de la Generalitat.

Por lo que respecta a una financiación todavía mayor, ERC persigue objetivos como una condonación de la deuda que el Ejecutivo autonómico catalán mantiene con el Estado central.