Puigdemont sí consigue erosionar a Junqueras tras la conferencia de Bruselas
El creciente protagonismo del expresidente de la Generalitat fugado acrecienta las voces que reclaman al republicano que "dé un paso al lado"
8 septiembre, 2023 23:30Noticias relacionadas
El protagonismo del expresidente de la Generalitat fugado, Carles Puigdemont, durante las últimas semanas --especialmente tras la conferencia impartida ante los suyos en Bruselas el pasado martes-- está teniendo consecuencias inesperadas entre las filas de Esquerra Republicana hasta el punto de acrecentar las voces que piden a uno de sus principales dirigentes, Oriol Junqueras, dar “un paso al lado”.
Sus enemigos íntimos no solo contemplan estupefactos cómo quien se desentendía de la gobernabilidad de España y consideraba poco menos que un acto de traición pactar con el Gobierno, ahora se reúne con la vicepresidenta del Ejecutivo y líder de Sumar, Yolanda Díaz, y se abre a facilitar el gobierno de Pedro Sánchez, aunque sea a cambio de una amnistía y de un referéndum de autodeterminación.
La mesa de diálogo "no ha servido para nada"
El camino hacia el diálogo que ha emprendido el partido del fugado está sorprendiendo a la familia de ERC más afín a Junqueras, también integrada por perfiles como la secretaria general, Marta Rovira. Según explican fuentes cercanas, ambos están cuestionados tras los malos resultados obtenidos en las últimas elecciones municipales y generales, pero lo están todavía más después de ver que “la mesa de diálogo” iniciada con el Gobierno “no ha servido para nada”, mientras que el prófugo está consiguiendo vender que su precio a la investidura es mucho más alto que el de sus exsocios.
“Al final, su estrategia ha fracasado. La mesa de diálogo no ha servido para nada, por eso hay algunos que piden reemplazar su sitio”, expresan las mismas voces en declaraciones a este medio. Las mismas que ven difícil su retirada ante un eventual regreso de Puigdemont a Cataluña, con el que podría competir en unas futuras elecciones autonómicas en febrero de 2025.
Enemigos íntimos
No es ninguna sorpresa que, quienes antaño fueron president y vicepresident de la Generalitat durante los momentos más intensos del procés, se han convertido desde hace tiempo en enemigos íntimos. Lo han demostrado sus estrategias antagónicas y sus ataques velados, tanto en público como en privado.
Si bien el Govern está en manos de Pere Aragonès, es conocido que Junqueras sigue siendo una figura muy influyente y que, ahora, se está viendo perjudicada por un Puigdemont que ha vuelto a la escena política trasladando una percepción de poder y una mayor habilidad negociadora.
Aragonès se "agarra" al Govern
En los últimos años, ERC se ha destacado por un liderazgo bicéfalo: uno político de Aragonès que ostenta la presidencia de la Generalitat, y uno moral por parte de quienes acabaron en prisión por el referéndum ilegal del 1-O. Hoy por hoy, las fuentes cercanas al partido aseguran que las negociaciones de la investidura “debilitan más a Oriol Junqueras que a Aragonès”, que está “agarrado” al Govern intentando aguantar hasta el final de legislatura.
Pero la debilidad de Junqueras se gestó mucho antes de las negociaciones para la investidura. El republicano empezó a estar cuestionado después de las últimas elecciones municipales del 28 de mayo, cuando su partido se dio un batacazo notorio en toda Cataluña, pero, especialmente, en las cuatro capitales de provincia y el área metropolitana de Barcelona.