El fracaso del plan de Junqueras y Rufián: ERC se estrella en los grandes municipios

Fracaso sin paliativos. Sólo así pueden calificarse los resultados de ERC en las pasadas elecciones municipales del 28 de mayo. Un batacazo que ha sido notorio a todos los niveles, tanto en el conjunto de Cataluña -donde los republicanos perdieron un 6,2% de los votos y 219 concejales en comparación con 2019, año en que fueron la fuerza más votada- como, de forma especialmente rotunda, en las cuatro capitales de provincia y el área metropolitana de Barcelona, habitual feudo socialista y donde históricamente el secesionismo ha tenido menos votos, predicamento y representación.

Clara victoria del PSC

El objetivo y la estrategia planeada desde 2011 por el presidente de ERC, Oriol Junqueras, de "ensanchar la base" y crecer electoralmente en estas grandes ciudades y barrios obreros, donde se concentra mayoría de la población y el voto de izquierdas ha sido tradicionalmente más numeroso que el de ERC y otras formaciones nacionalistas, se ha estrellado con la realidad. Y es que su programa, su discurso y su obra de gobierno al frente de la Generalitat continúan sin atraer, por lo visto, a ese electorado al que pretenden ganarse.

Así lo evidencian los resultados de las pasadas municipales del 28M, donde se aprecia de forma clara el naufragio de ERC en los 23 mayores municipios de Cataluña, es decir, aquellos con más de 50.000 habitantes. Los republicanos tan sólo ganaron en votos y obtuvieron la alcaldía en uno de ellos: Manresa, tradicional feudo nacionalista de la Cataluña interior. Un balance que contrasta con el del PSC, claro ganador, ya que los socialistas fueron la lista más votada y obtuvieron la alcaldía en 16 municipios sobre ese total de 23, mejorando, además, sus resultados respecto a hace cuatro años. El anhelo de Junqueras de ganar votos a costa del PSC ha caído, por lo tanto, en saco roto.

Fiasco de Ernest Maragall en Barcelona

En este sentido, el caso de la ciudad de Barcelona ha sido paradigmático. El candidato de ERC a la alcaldía, Ernest Maragall, pasó de ser el más votado en 2019 -algo que no había ocurrido nunca desde la recuperación de la democracia- al cuarto en 2023, perdiendo por el camino la mitad de sus sufragios (un 10,1% menos, hasta caer a un pírrico 11,2%), y quedándose con sólo cinco concejales. Su discurso tenso, crispado y desabrido hacia el PSC, los comunes y el PP durante la investidura del socialista Jaume Collboni como nuevo alcalde -y en los días posteriores- reflejó, sin duda, la frustración de los republicanos por sus pobres resultados.

Pero ese descenso de ERC también se dio en el resto de municipios del área metropolitana barcelonesa. Por ejemplo, en Badalona, donde Xavier García Albiol (PP) recuperó la mayoría absoluta y dejó a la formación de Junqueras sin opciones de reeditar alianzas multipartitas con Guanyem Badalona, los comunes y el PSC.

Batacazo inapelable de los republicanos

Igual de estrepitoso ha sido el fracaso de los republicanos en otros grandes municipios catalanes como Mataró (donde obtuvieron un 12% menos de votos que en 2019, pasando de 8 a 4 concejales); Sabadell (casi un 9% menos, pasando de 7 a 3 concejales); Vilanova i la Geltrú (un 14,2% menos, pasando también de 7 a 3) o Lleida (un 8,5% menos y sólo dos regidores). Un balance, con todo, mejor que en otras ciudades donde, al igual que en Badalona, ni siquiera han alcanzado el 10% de los votos. Tal ha sido el caso de Terrassa, donde ERC sólo ha obtenido un 7,56% de los sufragios y dos concejales; o Castelldefels, con el 8,21% y también dos regidores.

Inmerso en este desolador panorama, ERC sólo ha mejorado sus resultados en dos de estos 23 grandes municipios mayores de 50.000 habitantes: Viladecans, donde ha reeditado sus cinco concejales, pasando del 17,79% al 19,04% de los votos; y Santa Coloma de Gramenet, donde presentó como candidato a su diputado estrella en el Congreso, Gabriel Rufián.

El tirón mediático de Rufián no basta: Parlon reedita su mayoría absoluta

Con todo, el tirón mediático de Rufián, y su considerable presencia en los medios de comunicación, fruto de su discurso populista y vehemente, ha quedado lejos de sus expectativas. A pesar de alcanzar el 14,9% de los votos en este municipio obrero -un 5% más que en 2019- y cuatro concejales -uno más que hace cuatro años-, su resultado fue pobre. Y su intento de arrebatar votos al PSC, un fracaso: así, la socialista Núria Parlon reeditó su mayoría absoluta logrando el 51,34% de sufragios -un resultado incluso mejor que en las anteriores municipales- y conservó sus 17 concejales.

Resultados de ERC el 28M en municipios de más de 50.000 habitantes (entre paréntesis, concejales obtenidos)

De bien poco le sirvieron, por tanto, a Rufián su popularidad mediática y en las redes sociales, sus reiteradas invectivas contra Parlon, ni sus promesas electorales, algunas de las cuales se vieron, además, marcadas por la polémica. En este sentido, cabe recordar la polvareda que suscitó el uso partidista que hizo de la Generalitat el candidato de ERC a la alcaldía, comprometiéndose a construir una residencia junto al conseller de Derechos Sociales, Carles Campuzano, en algo que es competencia de éste. Una jugada que repitió, por si fuera poco, días después, prometiendo crear tres nuevas guarderías si ganaba las elecciones, junto al entonces conseller de Educación, Josep Gonzàlez-Cambray, en algo de su dependencia.

Adiós a la alcaldía de Sant Cugat

La pírrica mejora de resultados de Rufián ha sido una gota de agua en el mar de malos resultados de ERC. El naufragio de la formación de Oriol Junqueras se ha dado, incluso, en el único gran municipio del área metropolitana barcelonesa donde los nacionalistas suelen estar al mando: Sant Cugat del Vallès. En esta localidad, histórico feudo convergente, y uno de los de mayor renta per cápita de Cataluña y de toda España, la republicana Mireia Ingla se ha quedado sin la vara mando después de haber desbancado a Junts la pasada legislatura gracias a una alianza con el PSC y la CUP.

Sant Cugat fue, junto a Barcelona, el único de los 23 grandes municipios de Cataluña donde Junts consiguió ser la lista más votada, si bien en la capital catalana su candidato Xavier Trias se quedó sin la alcaldía gracias a un pacto de investidura entre el PSC, Barcelona en Comú y el PP. Con todo, a ERC siempre le quedará el consuelo de haber obtenido, en conjunto, unos resultados que, aún siendo malos, han sido mejores que los de los posconvergentes en el área metropolitana barcelonesa. No en vano, la presencia de éstos en la mayor parte de ellos es menor.