Noche negra para Esquerra Republicana. El candidato por Barcelona al Congreso de los Diputados, Gabriel Rufián, ha recibido este 23J un correctivo que se suma al que ya recibió en las últimas elecciones municipales del 28 de mayo, cuando el partido apostó por él como cabeza de lista en Santa Coloma de Gramenet (Barcelona) en un intento de hacerse con apoyos del PSC de Núria Parlón.
En estos comicios generales, Rufián tampoco ha sido capaz de movilizar a sus electores. Ello pese a que el Congreso de los Diputados es una arena que él domina al haber sido diputado en otras ocasiones, a diferencia de su inexperiencia en el ámbito municipal.
Una estrategia fallida
Pero este 23J, el republicano ha recibido un nuevo correctivo empatando con Junts en escaños y seguido, muy de cerca, por el PP, que ha obtenido seis diputados. Algo impensable hace unos años, especialmente durante los tiempos del procés tras la aplicación del artículo 155 de la Constitución en el mandato de Mariano Rajoy.
El plan de los republicanos ha resultado fallido. El cabeza de lista por Barcelona ha basado su campaña de las últimas semanas al defender la estrategia de su partido en Madrid, sacando pecho de la mesa de diálogo con el Gobierno de España, de la reforma de la malversación y la sedición y de arrancarle los indultos a Pedro Sánchez. Ni siquiera esos avances han servido a la formación que lidera Oriol Junqueras para acercarse a la primera posición de los socialistas, que alcanzan una holgada victoria y que se mantienen fuertes en toda la comunidad.
Pero la estrategia de ERC tampoco ha servido para dejar atrás a su inmediato competidor, Junts. A pesar de que esta formación está dividida, no cuenta con una acción de gobierno que capitalizar desde que abandonó del Govern y ha tenido una influencia mucho más limitada en Madrid.
La estrella de Rufián se apaga
Los republicanos han sido casi alcanzados, incluso, por el PP. Un partido que no tiene la implantación que tiene ERC en Cataluña y que apenas gobierna en tres municipios catalanes --Pontons, Badalona y Castelldefels--. Pese a ello, los de Alberto Núñez Feijóo están pisándole los talones en la comunidad autónoma, con Nacho Martín Blanco al frente en Barcelona.
Tras estos malos resultados, cabe preguntarse si la dirección del partido cuestionará la continuidad del candidato al frente de la delegación catalana en Madrid. Y es que estos resultados tan pobres y tan decepcionantes para la formación sólo evidencian que la estrella política y mediática de Gabriel Rufián comienza a apagarse.
Además, está por ver si este hundimiento empujará a ERC a cuestionar su estrategia de diálogo con el gobierno del PSOE y a plantearse si gobernar la Generalitat en solitario es una decisión acertada. Sobre todo, teniendo en cuenta que su gobierno en minoría no les da ningun rédito político mientras que Junts, insignificante en las instituciones catalanas, apenas sufre desgaste.
Noticias relacionadas
- El PSC arrasa en las elecciones generales en Cataluña, con gran remontada del PP
- Fracaso sin paliativos de la CUP: pierde sus dos diputados en el Congreso
- El PSC también le ganó terreno a ERC en el feudo 'indepe' de Girona
- El PSC gana en Lleida entre la desmovilización independentista
- El PP recupera su escaño en Tarragona y los 'indepes' sufren un descalabro