El presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonès (ERC), ha advertido este jueves de que la acción exterior es "una de las grandes prioridades" de su gobierno y ha anunciado que la reforzarán todavía más tanto cuantitativa como cualitativamente.

El mandatario secesionista ha alardeado de los recursos públicos destinados a esta materia en un encuentro en el palacio de la Generalitat con representantes de sus 20 delegaciones o embajadas políticas en el extranjero: "Somos el gobierno de una nación sin Estado con más presencia internacional", ha dicho.

108 millones de gasto

El Ejecutivo autonómico catalán ha destinado en sus Presupuestos de 2023 --aprobados con el apoyo del PSC-- un total de 108 millones de euros para sus asuntos exteriores. Una cifra que supone un récord histórico, y un 11% más que los 98 millones de 2022.

El gasto para esta finalidad ha sido muy cuestionado en los últimos años desde la oposición no nacionalista, dado que ha crecido de forma exponencial durante el procés: en 2020 el dispendio fue de 78 millones y en 2017, 65 millones.

Delegaciones de corte político

Y no parece que esa tendencia vaya a disminuir, sino todo lo contrario. Aragonès ha explicado que su Govern está "a punto de cubrir casi la totalidad del continente americano y también toda la Unión Europea, además de dar pasos para consolidar la presencia en Asia y África", según afirma el Ejecutivo catalán en un comunicado.

Por esta razón, Aragonès recuerda que la Consejería de Acción Exterior cuenta en la actualidad con el presupuesto más alto de su historia.

Todavía más recursos

El mandatario secesionista, de hecho, ha enfatizado que la voluntad de su Govern es tener todavía más embajadas en el extranjero porque, según él, "con una acción exterior aún más fuerte, podremos responder mejor a las necesidades e intereses de Cataluña en el mundo".

Asimismo, ha destacado que dicha red "es positiva para el tejido empresarial, para tener nuevos mercados y para captar nuevas inversiones". Sin embargo, cabe recordar que, para cuestiones económicas, la Generalitat ya dispone de otra red de oficinas en el extranjero, dependientes en su caso de la Consejería de Empresa.

"Aliados de Cataluña"

El presidente de la Generalitat ha reconocido además que el objetivo de su Consejería de Acción Exterior es reforzar más esa red de delegaciones políticas: "Ahora lo que toca es coger velocidad de crucero y dotar a las delegaciones de recursos para funcionar aún mejor".

El dirigente secesionista ha añadido que tener presencia en todo el mundo también es útil para lo que llama "aliados de Cataluña, los gobiernos con los que nos relacionamos y con quienes tenemos intereses compartidos", con los que ha asegurado que quieren crear relaciones estratégicas.

En este sentido, cabe recordar que una de las últimas iniciativas de la Generalitat de Cataluña en el extranjero ha sido crear la figura de un "enviado especial" en Irlanda del Norte, dependiente de su embajada en el Reino Unido. Lo cual suscita polémica, pues esta misma semana, por ejemplo, Aragonès reiteró su apoyo al Sinn Féin, partido secesionista ganador en las elecciones municipales norirlandesas, y antaño considerado como el brazo político de la banda terrorista IRA.

Propaganda nacionalista y críticas a España

En la actualidad, la Generalitat de Cataluña cuenta ya con una veintena de embajadas políticas en todo el mundo, desde las cuales  se han difundido incluso mensajes propagandísticos contra España, tal como hizo la exconsellera Victòria Alsina en México a finales de 2021.

Por esas fechas, según datos del Govern, la red de embajadas de la Generalitat en el extranjero tenía a su servicio a más de 70 personas trabajando en ellas. La que contaba con más personal era la de la Unión Europea (UE), con 15, mientras que en el resto, la plantilla oscilaba entre cuatro y siete.

Sueldos casi 'cienmileuristas' para los 'embajadores'

Los delegados de estas oficinas tienen un sueldo de 87.456 euros. En el caso de la Oficina de Bruselas, cuenta además con un delegado adjunto que cobra 79.917 euros. Los técnicos cobran entre 56.300 euros y 43.221 euros, mientras que los gestores tienen un sueldo de 32.281 euros. Los administrativos reciben 32.622 euros y las secretarias, hasta 40.206 euros.

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