A la izquierda, el Hotel Aristol, donde el Ayuntamiento de Barcelona pondrá un albergue de sintecho toxicómanos; a la derecha, la escuela pública Mas Casanovas / CEDIDA

A la izquierda, el Hotel Aristol, donde el Ayuntamiento de Barcelona pondrá un albergue de sintecho toxicómanos; a la derecha, la escuela pública Mas Casanovas / CEDIDA

Política

El ayuntamiento, a los padres del colegio junto al futuro centro de toxicómanos: “No hay otro sitio”

El consistorio de Barcelona desoye la petición de los familiares de alumnos de la escuela Mas Casanovas de poner en otro lugar un albergue para adictos que instalará en la acera de enfrente

24 diciembre, 2021 17:00

El Ayuntamiento de Barcelona no da marcha atrás en su decisión de instalar un albergue para personas sin hogar adictas al alcohol y las drogas justo en la acera de enfrente de un colegio del barrio del Baix Guinardó. Así se lo ha hecho saber a la Asociación de Madres y Padres (AFA) de la escuela Mas Casanovas, a los que ha transmitido que no existe otro lugar en toda la ciudad para ubicar el polémico equipamiento.

Así lo ha comunicado la propia AFA después de que el consistorio los citara este jueves para reunirse con responsables del Distrito de Horta-Guinardó y de la Agencia de Salud Pública de Barcelona. “Nos han asegurado que no hay ningún otro sitio para hacer el cambio de ubicación en toda Barcelona. La ubicación la pone la asociación adjudicataria y es el lugar que tienen”, explican los padres y madres en el perfil de Twitter de la AFA, indignados porque hasta la semana pasada no conocieron, y de forma casual, las intenciones del ayuntamiento de poner un centro de toxicómanos a apenas 15 metros de la escuela de sus hijos.

Tuits de la AFA Mas Casanovas

Tuits de la AFA Mas Casanovas

En esa misma reunión, añaden, los responsables municipales se comprometieron a hacer un plan específico de prevención por la afectación a los niños: “Nos han asegurado que lo harán ahora y nos lo pasarán la semana que viene”, afirman. Y que, para que esa afectación sea mínima, pondrán “medios extraordinarios” como “papeleras, alumbrado o equipaciones”.

Rechazo de las familias

El consistorio propone a la AFA seguir reuniéndose con ellos “para completar” su plan. Y se compromete ahora a invertir en esta escuela de infantil y primaria, a la cual asisten menores de 3 a 12 años, para “solucionar todos los problemas de dejadez que hay actualmente” en las instalaciones de este colegio público.

Los planteamientos de los responsables del Distrito han aumentado, si cabe, el malestar de las familias, pues continúan “sin estar de acuerdo con la ubicación elegida” para el albergue de toxicómanos sintecho, al considerar que “no hay suficientes garantías hacia los niños y se tiene que encontrar otro sitio”.

"¿Quién querrá matricularse ahora?"

Consultado por Crónica Global, un portavoz de la AFA se muestra indignado tanto por la forma de actuar del consistorio como por sus respuestas: no da crédito a que se les diga que en toda Barcelona no haya otro lugar para ubicar este albergue, y le sorprende que se ponga ahora interés en arreglar instalaciones de la escuela que llevan maltrechas desde hace tiempo: “Hay que hacerle un lavado de cara completo desde hace años”, señala, más allá de arreglos puntuales. Y advierte de que, si se abre el albergue de toxicómanos, “en dos años pueden tener que cerrar el cole, porque nadie se querrá apuntar. ¿Cómo va a querer la gente matricularse allí?”.

Protesta ante la escuela Mas Casanovas y el Hotel Aristol, donde el Ayuntamiento de Barcelona pondrá un albergue para personas sin hogar toxicómanas / CEDIDA

Protesta ante la escuela Mas Casanovas y el Hotel Aristol, donde el Ayuntamiento de Barcelona pondrá un albergue para personas sin hogar toxicómanas / CEDIDA

Este medio ha intentado recabar, sin éxito, la versión del ayuntamiento sobre la reunión. Un día antes, fuentes municipales rechazaron dar explicaciones, apuntando que comentarán el asunto cuando consideren oportuno.

Primeras protestas

Familiares de alumnos y vecinos se concentraron el jueves por la tarde delante del Hotel Aristol --lugar donde el consistorio pondrá el polémico equipamiento, a apenas 15 metros de la escuela-- para protestar contra una decisión adoptada, según denuncian, de forma unilateral, con secretismo, y de la cual tuvieron constancia la semana pasada de manera casual.

Los padres y madres temen que se repitan junto a la escuela en la que estudian sus hijos escenas y conflictos como los que este mismo equipamiento ya ha causado en el barrio de Les Corts, donde se instaló de forma provisional hace año y medio en la Fundación Pere Tarrés, también cerca de algunos colegios. En sus inmediaciones, los vecinos aseguran haber visto y vivido todo tipo de situaciones de inseguridad: desde consumo y tráfico de drogas en plena calle, jeringuillas en el suelo y gritos hasta personas orinando, defecando u haciendo actos sexuales en la vía pública, según denunció el digital Metrópoli el pasado 30 de septiembre.

Los padres ponen énfasis en que su rechazo no es a que se abra una instalación de este tipo, sino al lugar elegido: el chaflán de las calles Cartagena y Mas Casanovas, justo en la acera de delante de una escuela de infantil y primaria con cientos de niños. Anuncian que llevarán a cabo más protestas para evitar que se ubique en ese lugar. Y ya han puesto en marcha una recogida de firmas en change.org para reclamar al consistorio encabezado por Ada Colau que rectifique su decisión.