Los independentistas arrancan la campaña contra Illa

Era Pere Aragonès quien se sometía a la investidura, pero en algunos momentos del debate, parecía que el protagonista de la sesión fuera Salvador Illa. Dicho de otra manera, el pleno donde debía decidirse si el republicano sería nombrado presidente de la Generalitat mutó en duros ataques de las formaciones independentistas contra el socialista, que luego se hicieron extensivos a las redes sociales.

El motivo no es otro que el ambiente preelectoral que se ha instalado en el Parlament, donde Aragonès quedó derrotado por segunda vez. La cuenta atrás para una repetición electoral ha comenzado y el tiempo dirá si ERC y Junts per Catalunya (JxCat) entierran el hacha de guerra y llegan a un acuerdo antes de que transcurran dos meses. Expertos consultados por Crónica Global aseguran que una nueva contienda electoral podría beneficiar a JxCat, pero también a los socialistas. Illa es, por tanto, en principal rival a combatir. Tampoco son ajenas a esas embestidas las elecciones para la Asamblea de Madrid que se celebrarán el 4 de mayo y que exigen del socialismo catalán mucha cautela.

Maragall y el Estatut

La pugna por el legado de Pasqual Maragall entre ERC y PSC demuestra hasta qué punto ambos partidos son conscientes de la importancia de hacer propuestas inclusivas que amplíen las bases electorales. Tanto Aragonès como Illa citaron al expresidente catalán. El primero lo hizo para recordar la frase “Una nueva Cataluña, más desinhibida, menos sagrada y menos sacralizadora, más a ras de suelo". El segundo, para advertir de que “Cataluña puede ir muy lejos aún si lo hace sobre la base de lo que es, de lo que tiene, lo que quiere, de lo que propone y lo que exige. No se va lejos sobre la base de una quimera, de un sueño truncado”. La cita de Illa escoció a republicano, quien arremetió con el recorte estatutario de José Luis Rodríguez Zapatero.

Sergi Sabrià, diputado de ERC, fue mucho más incisivo sobre la memoria de Maragall. "Hemos oído otra vez el PSC llenándose la boca de consenso y de diálogo, pero en este país el consenso es la amnistía y la autodeterminación. Por lo tanto, son ustedes los que se han marchado los grandes consensos de este país. Son ustedes que hablan de dos Cataluñas, no nosotros, que hablamos siempre de un país para todos en forma de república. Y yo les diría que se miren al espejo, pero no lo hacen porque no se gustan. Porque no quieren ver que de aquel PSC del Maragall que citan ya no queda nada. Los que realmente creían se fueron y hoy están en ERC”.

La gestión de Illa como ministro

Pero más allá del preceptivo toma y daca entre candidato y quien estaba llamado a ser jefe de la oposición -- el PSC ganó en votos el 14F, pero empató a 33 escaños con ERC--, Illa también sufrió los reproches de JxCat a través de su portavoz Gemma Geis, que hizo un repaso a la gestión del socialista como ministro de Sanidad. “Usted, como ministro, lo primero que hace es recentralizar las competencias de Salud. Y sabemos también qué dificultades tuvimos con la gestión del material para proteger de la pandemia. Por lo tanto, usted que dice que siempre decimos los culpables son los otros, miremos también de hacer autocrítica”. Indignada con las afirmaciones de Illa sobre el “engaño” del procés, Geis le acusó de "menospreciar a cada una de las personas que depositan libremente su voto”.

Desde JxCat hicieron extensivas sus críticas en las redes sociales, donde cuestionaron la catalanidad de Salvador Illa por pronunciar algunas frases en castellano. Especialmente crítica fue la diputada Aurora Madaula: "No sabeis la vergüenza y rabia que me da que el candidato del PSC pase al castellano en el Parlament", dijo. Otros cargos y activistas se sumaron a esa exclusión lingüística. "El PSC de Ila, emulando la derecha españolista hablando en castellano en el Pleno del Parlamento, cada vez más lejos de los grandes consensos de país. ¿De verdad alguien espera poder pactar nada con los socialistas?", escribió el secretario segundo de la Mesa del Parlament, Jaume Alonso-Cuevillas.

Por parte de la CUP, Eulàlia Reguant acusó a Illa de ser “el mayordomo del Ibex 35 y el vasallo de la monarquía corrupta, aliándose con el partido más corrupto de Europa como el PP, con Ciudadanos y el partido fascista de Vox”. Nada dijo Reguant de los casos de corrupción de CDC, siglas que sus virtuales socios neoconvergentes tapan y destapan, rechazan o hacen suyas en función de sus necesidades electorales.

Asimismo, la diputada aseguró que el discurso de Illa demuestra que “el Gobierno español no tiene ninguna voluntad de abrir una vía de resolución democrática del conflicto”. Así respondían los cupaires a las críticas de Illa, quien previamente había acusado a ERC de ser rehén de los antisistema.

Críticas de Cs y PSC

Pero el socialista también recibió embestidas del bloque constitucionalista. Alejandro Fernández, presidente del PPC, comentó: “Se ha quejado amargamente de que Esquerra, y le cito a usted textualmente, les ha vetado para el diálogo de la formación de un gobierno. ¿Se da cuenta de que acaba de reconocer que mintió como un bellaco en campaña electoral diciendo que jamás negociaría con Esquerra un gobierno? Es que lo acaba de decir a tumba abierta, y se ha quedado tan ancho”.

Ahondaba así el popular en la posibilidad de que ERC, PSC y los comunes lleguen a un acuerdo si, finalmente, republicanos y neoconvergentes rompen definitivamente. Un acuerdo que pasaría por una abstención de los socialistas, que controlarían desde la oposición ese gobierno de izquierdas. Pero, de momento, Aragonès no suelta lastre. Reconoce en privado que la diferencia de votos con JxCat es mínima y que no puede desvincularse.

Chantaje de los nacionalistas

“Usted tiene todo el derecho del mundo a intentar y a ensayar un gobierno con Esquerra y con los comunes; a lo que no tenía derecho era a mentir sistemáticamente en campaña electoral, y es lo que hizo y engañó a muchísimos catalanes de buena fe que creyeron que usted tenía otras prioridades y otras opciones”, añadió Fernández.

Carlos Carrizosa, líder catalán de Ciudadanos, también aprovechó para hacer campaña. “A ver si el PP y el Partido Socialista llegan a la conclusión de una vez de que no podemos edificar nada sobre el chantaje de los nacionalistas. Hay algunos que a las mesas de diálogo las llaman de diálogo y son, en realidad, este perpetuo chantaje que llevamos viendo mucho tiempo. Recuerdo al PP y al Partido Socialista que existe una alternativa para gobernar España dentro de unos cauces más de centralidad y de normalidad, que es la vía de Arrimadas, la conjunción de esas tres grandes líneas políticas centrales que gobiernan Europa, que es el partido conservador, el partido socialdemócrata y los liberales”.