La crisis de El Homrani, un borrón en el historial de gestión de ERC
La remodelación de un macrodepartamento ingobernable, que ya perdió las competencias en residencias, es el punto álgido de una caótica administración republicana que incluye a salud y educación
17 noviembre, 2020 00:00Quiso el destino, y sobre todo las ganas de ERC de demostrar su capacidad de gestión, que las tres consejerías sociales que cayeron bajo su control estuvieran en el foco mediático y político durante la pandemia. Sanidad, Educación y Trabajo y Asuntos Sociales fueron los departamentos clave en esta crisis, víctimas de los recortes nunca revertidos desde el gobierno de Artur Mas. “Hemos reaccionado con rapidez”, aseguran fuentes de Esquerra, conscientes de que este borrón en su historial se produce a tres meses de las elecciones catalanas.
Si en el ámbito sanitario fueron numerosísimos los focos susceptibles de ser apagados debido al galopante aumento de fallecidos y el colapso del sistema sanitario --Salud estuvo dos meses sin secretario de salud pública--, en educación se asistió a un retorno al colegio caótico que puso de manifiesto la falta de recursos materiales --brecha digital-- y personal --insuficiencia de profesores para afrontar la bajada de las ratios--.
Renta Garantizada de Ciudadanía
Pero ha sido en la Consejería de Trabajo, Asuntos Sociales y Familia donde ha estallado la crisis total. Es en este departamento dirigido por Chakir El Homrani donde, a tres meses de las elecciones catalanas previstas para el 14 de febrero, se ha acometido una remodelación que cierra el falso los fallos estructurales de un macrodepartamento que, conviene recordar, también administra la Renta Garantizada de Ciudadanía (RGC), otro fiasco que ha contribuido a disparar la pobreza en Cataluña. Pero el detonante de esos cambios no es otro que el colapso de la web que gestiona las ayudas a los autónomos.
Unas subvenciones a fondo perdido insuficientes en esta última tanda --20 millones de euros-- a las que los afectados debían acceder en una humillante carrera por ser los primeros. Después vendría en cruce de acusaciones entre El Homrani y el consejero de Políticas Digitales, Jordi Puigneró (Junts per Catalunya), quien entretenido en proyectos literalmente galácticos --una NASA catalana--, olvidó la importancia de garantizar al ciudadano el acceso a una ventanilla online sin problemas.
El secretario general de CCOO de Cataluña, Javier Pacheco, expresó anoche su sorpresa, pues “creemos que a tres meses del final de la legislatura pocos cambios estructurales podrán producirse. La deficitaria gestión de la crisis necesita un mayor nivel de coordinación entre departamentos y mayor consenso con los agentes económicos y sociales con un pacto de un plan de choque para salvar sectores afectados y el empleo vinculado”. UGT de Cataluña, donde se formó el conseller, también mostró su incredulidad con la repentina crisis en el departamento. Con todo, sus líderes prefirieron no hacer declaraciones a la espera de conocer las explicaciones públicas de El Homrani.
Traspaso de las residencias
No es la primera vez que, durante el coronavirus, se han efectuado cambios dentro de esta consejería. En abril, El Homrani traspasó la gestión de las residencias de ancianos a Salud tras dispararse la mortalidad en estos centros. De nuevo, se puso de manifiesto la necesidad de una atención primaria integral que, desde hace años, reivindican los profesionales del sector. Además, informaciones posteriores han confirmado que el caos que se vivió en los días más duros de la primera oleada de la pandemia llegó al extremo de que las residencias desconocían a qué hospitales se había trasladado a algunos dependientes.
Todo ello supone un enorme borrón en el historial de gestión de ERC, con Pere Aragonès ejerciendo de presidente en funciones con la esperanza de llegar al 14F con un historial de gestión, cuando menos, digno, frente a la confrontación identitaria y vacua de Junts per Catalunya.
¿Dimisión de El Homrani?
El Homrani ha movido piezas en su negociado, aunque a juzgar por las declaraciones de la portavoz de ERC, Marta Vilalta, pudo ser él quien saltara del organigrama. Si no se hizo, según Vilalta, es porque "poner el cargo a disposición en un momento como el actual, en el tiempo de descuento de esta legislatura", no deja posibilidad material de nombrar a un sustituto.
Culpa de ello al Tribunal Supremo por la inhabilitación del expresidente Quim Torra tras negarse a retirar una pancarta cuando se lo indicó la Junta Electoral. "No creo que sea la mejor de las decisiones", ha manifestado la portavoz del partido en la primera reacción pública de la enésima crisis en el Ejecutivo catalán. Cierre en falso, pues, a la espera de que el Govern dé explicaciones en el Pleno que comienza este miércoles en el Parlament.