El Govern anima a las prisiones catalanas a considerar la liberación de los políticos presos

La consejera de Justicia, Ester Capella, invita a las cárceles catalanas a “esponjar” las cárceles catalanas en estos tiempos de coronavirus, y entre otros, liberar a los líderes independentistas condenados por el referéndum ilegal del 1-O. “Hay unas 400 personas a las que se les aplica el artículo 100.2 del reglamento penitenciario y podrían confinarse en casa”, subraya.

Capella, que insiste en aplicar una amnistía a los políticos presos, recuerda que para enviar a casa los reos a los que se les aplica dicha norma legal “no se requiere aprobación de un juez, aunque éste “tiene la última palabra”.

La consellera de Justicia, Ester Capella / YOUTUBE

Argumentos coincidentes

También ha recordado este martes en Catalunya Ràdio que los directores de todos los centros catalanes se reúnen durante este día con las juntas de tratamiento para decidir qué hacer con los presos de las cárceles catalanas. En este sentido, ha hecho un llamamiento a considerar que “un decreto como el estado de alarma vulnera algunos derechos pero no el de la vida”.

Este mismo derecho al que apela Capella es el que han alegado el exvicepresidente de la Generalitat Oriol Junqueras y el exconsejero Raül Romeva para reclamar su salida de prisión. Sus abogados han pedido este lunes al Tribunal Constitucional (TC) que suspenda la pena de prisión que les impuso el Supremo por su papel en el procés independentista catalán y los excarcele en base al estado de alarma por la pandemia del coronavirus. Su abogado, Andreu Van den Eynde, requiere que de forma "urgente" se suspenda la ejecución de sus respectivas condenas, de 13 y 12 años de cárcel, apelando a los derechos fundamentales a la vida, la integridad física y moral, la dignidad y la vida familiar.

"Decisiones objetivas"

Muy parecidas son las palabras de la consejera a la hora de defender la necesidad de liberar a los presos a los que se le aplica el artículo 100.2: “Hemos de velar por la salud, por la integridad física y por la vida que está en nuestra tutela”, en referencia a los reos de las cárceles catalanas.

“Las juntas de tratamiento deberán analizar y ver qué margen legal hay” y qué otras medidas pueden adoptar. El objetivo es que haya menos gente en las prisiones y la gente quede confinada en su casa. Eso no implica que todos los presos a los que se les aplica el citado artículo puedan salir, admite, sino que se debe tener en cuenta los recursos de cada preso como “tener una vivienda” y siempre tomando “decisiones objetivas”, asevera.

Motines y contagios

Capella subraya que, desde el 13 de marzo, la Generalitat está tomando medidas para reducir el número de personas en las cárceles catalanas y asegura que “el 69% de los personas que están en un régimen de tercer grado duermen en sus casas”, en aplicación del artículo 86,4 del reglamento penitenciario y esperan ampliar estas medidas.

Lo cierto es que el Govern ha suspendido las visitas vis a vis, restringido la comunicación y las actividades de personal externo en las cárceles para evitar los contagios del Covid-19. Indica que, pese a los motines que se han producido estos días, en las prisiones catalanas sólo hay nueve reos con coronavirus SARS-CoV-2 y 34 sospechosos y 19 funcionarios contagiados y 239 en cuarentena “más las bajas de funcionarios que ronda el millar de personas”.