Las tretas de eurodiputados independentistas para esquivar una condena

Tirar la piedra y esconder la mano. Esto es lo que hicieron tres eurodiputados independentistas cuando, tras ser demandados por injurias, invocaron su inmunidad y endosaron el pago de la indemnización correspondiente a una serie de entidades que apoyaron su campaña difamatoria contra Societat Civil Catalana (SCC).

Se trata de los eurodiputados de ERC Josep Maria Terricabras y Ernest Maragall, y el de CiU Ramon Tremosa, quienes se han librado de pagar los 15.000 euros de indemnización impuestos por la Audiencia de Barcelona.

Imagen del Parlamento Europeo / EFE

Todo parte de la decisión del Parlamento europeo de conceder el Premio Ciudadano Europeo 2014 a SCC. Un galardón al que también aspiraba la asociación independentista Assemblea Nacional Catalana (ANC). A partir de ahí, los tres eurodiputados catalanes, apoyados por Jordi Sebastià, Josu Juaristi y Lidia Senra, instaron a la Eurocámara a anular la concesión del premio porque, según sostenían, SCC tenía vinculaciones con el franquismo y con el nazismo. Así lo hicieron constar en varias iniciativas parlamentarias, y también en un manifiesto promovido por Terricabras, Tremosa y Maragall, firmado por otros diputados, ciudadanos y entidades sociales.

Vulneración del derecho al honor

Societat Civil, representada por el abogado Manuel Miró, presentó una demanda por vulneración del derecho al honor contra los citados parlamentarios, así como contra una serie de entidades que firmaron el documento. Sin embargo, los eurodiputados invocaron la inmunidad inherente a su cargo para eludir su responsabilidad judicial. 

El titular del Juzgado de Primera Instancia número 41 de Barcelona aceptó esa argumentación y les dejó al margen del procedimiento. SCC recurrió esa decisión, pero la Audiencia de Barcelona confirmó la inhibición del juzgado respecto a los diputados independentistas

El juez, en sentencia dictada el 5 de enero de 2019, sí condenó a Comissió de la Dignitat, Amical de Mauthausen i Altres Camps i de Totes les Víctimes del Nazisme d’Espanya, SOS Racisme, Fundació Congrés de Cultura Catalana y Fundació Catalunya-Fons per a la Defensa dels Drets del Catalans, así como a Marcus Pucnik, extrabajador de SCC.

El juez consideró que el manifiesto La sociedad civil de Cataluña por la dignidad, publicado el 30 de octubre de 2015, constituye “una intromisión ilegítima en el derecho al honor de SCC”. Por ello, el magistrado condenó a los demandados a indemnizar a esta asociación con una multa de 15.000 euros.

"Falta de legitimación pasiva"

Las entidades condenadas presentaron un recurso ante la Sección 19 de la Audiencia de Barcelona, fundamentado en una “falta de legitimación pasiva”, pues según alegaron, los autores del manifiesto habían sido Terricabras, Maragall y Tremosa, mientras que ellos se habían imitado a firmar el manifiesto a través de una página web en muestra de conformidad. Consideraban los recurrentes que “la simple muestra pública de apoyo a un texto redactado por otros impide la declaración de responsabilidad que se les hace sin que, de otro lado, quepa considerarles directores o editores de la publicación digital de dicho manifiesto”. También invocaban su libertad de expresión.

Sin embargo, la Audiencia ha rechazado recientemente el recurso de las demandadas y confirma la sentencia dictada en primera instancia.