Dolors Bassa ha salido de la cárcel hoy sábado, 25 de agosto, durante dos horas para visitar a su madre enferma. La exconsejera catalana de Trabajo se ha beneficiado de un permiso penitenciario concedido por el Tribunal Supremo --el primero del que gozan los políticos presos por el procés en Cataluña-- para arropar a su familiar, que se ha sometido a una operación de cadera.

La dirigente independentista, en prisión provisional acusada de rebelión y sedición por organizar el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017 y declarar posteriormente la independencia de forma fallida el mismo año, ha salido poco después de las diez horas de la mañana de la prisión de Puig de les Basses (Girona), donde está en custodia a la espera de juicio. Escoltada por dos vehículos policiales, Bassa ha sido transportada hasta la Cĺinica Girona, donde su madre se había sometido a la intervención quirúrgica. Dos horas después, poco después de mediodía, el convoy en el que viajaba la dirigente política ha regresado al centro penitenciario sin incidentes.

Sin protestas

Tal y como había pedido el abogado de Dolors Bassa, Mariano Bergés, los independentistas se abstuvieron de organizar protestas de apoyo a la líder separatista como hacen en otras ocasiones. La extitular de Trabajo salió y regresó sin novedad a uno de los presidios más modernos de Cataluña, donde está retenida en solitario a la espera del macrojuicio por el procés, ya que el resto de encausados se encuentran en otras prisiones.

Sólo un puñado de periodistas esperaban a la exconsejera ante la Clínica Girona a su salida, y a las puertas de la prisión gerundense a su regreso. Previo a todo ello, el letrado Mariano Bergés avisó de que "si finalmente el TS (Tribunal Supremo) confirma el permiso q hemos solicitado para que Dolors Bassa visite a su madre, la familia ruega encarecidamente q no haya concentraciones para respetar su intimidad y permitir un desarrollo normal del permiso. Es muy importante. Gracias por la comprensión".

Primer permiso

La salida temporal de Bassa de prisión llega en un momento de debate sobre el trato que el Gobierno catalán está dando a los políticos presos por el procés. Tal y como informó este medio, los reos disfrutan de beneficios que el resto de internos no tienen, como visitas más largas o más frecuentes, o tolerancia con las protestas a las puertas de las prisiones designadas.

Cabe recordar que las competencias en gestión de prisiones está traspasada a la Generalitat de Cataluña. Los independentistas se han venido concentrando los domingos ante el centro penitenciario de Lledoners (Barcelona), donde están en custodia preventiva los exconsejeros Oriol Junqueras, Raül Romeva y Quim Forn, amén de los activistas Jordi Cuixart y Jordi Sànchez. Asimismo, los martes el secesionismo se reúne ante la prisión de Puig de les Basses, donde está recluida Dolors Bassa. También ha habido marchas hasta la prisión de El Catllar (Tarragona), donde está la expresidenta del Parlamento catalán, Carme Forcadell.