Jordan / Redes sociales Jordan

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Jordan, emprendedor, acerca de Hacienda: “De ser una multa de 17.000 euros a tener que pagar 24.000 euros”

Este problema legal y económico llegó en el peor momento posible para Jordan, quien ya se encontraba lidiando con la pérdida de 35.000 euros por el fraude bancario

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Jordan, reconocido como uno de los mejores mecánicos de bicicletas de Barcelona y de España, ha emprendido uno de los talleres más grandes de la ciudad condal y, el cual, le ha llevado a lo más alto.

No obstante, el emprendedor catalán no ha tenido una carrera fácil, al final el emprendimiento conlleva varios obstáculos como los burocráticos, contratiempos, gestiones, proveedores, etc. de hecho, delegó ciertas gestiones en otras manos y fue lo que le llevó a encontrarse con Hacienda.

No todo sale como uno espera. Jordan recibió el segundo sablazo de Hacienda en su carrera profesional en un momento de crisis máxima para él a principios de 2024. Un hecho que fue una "puñalada" financiera tardía, ya que ocurrió justo después de que Jordan sufriera una estafa de microcargos que le había hecho perder 35.000 euros.

La carta de Hacienda, que exigía el pago inmediato o el embargo, lo obligó a confrontar la fragilidad de su gestión financiera, un aspecto que considera la parte "que no se ve" y que es "más importante que la que se ve".

El origen de este problema se remonta a una renta de 2020 mal presentada. En aquel año, Jordan había vendido un piso y se lo había notificado a su gestoría. No obstante, la gestoría le aseguró que la transacción "no salía registrado nada" en su registro y que el asunto "ya está solucionado".

A pesar de que la Agencia Tributaria suele notificar los errores fiscales entre enero y marzo del año posterior al error, en este caso, Jordan no recibió ninguna comunicación entre 2020 y 2024.

Por ende, “la cifra se disparó desde los 17.000 euros originales a los 24.000 euros debido a los recargos acumulados durante los cuatro años transcurridos”. La notificación llegó en el último año antes de que el caso prescribiera.

En este contexto, el catalán, señala que Hacienda interpreta el retraso como una falta de voluntad de pago: si un contribuyente no coopera o ignora el pago, la agencia asume que es "un hijo de puta que no quiere pagar". Por lo tanto, el ultimátum que recibió fue severo: "Bueno el mes que viene o me pagas o de embargo".

Este problema legal y económico llegó en el peor momento posible para Jordan, quien ya se encontraba lidiando con la pérdida de 35.000 euros por el fraude bancario. Aunque logró recuperar entre 18.000 y 20.000 euros de la estafa previa tras presentar una denuncia y batallar con el banco, la llegada de la reclamación de Hacienda por una cantidad tan elevada amenazó la supervivencia de su negocio.

La respuesta de Jordan ante esta amenaza fue firme, priorizando la defensa de su emprendimiento: "Chicos le van a dar por culo a esto. Este negocio es mío y no lo quiero perder".

Esta crisis fiscal y el contexto de estafas reafirmaron la necesidad de una gestión rigurosa, algo que ahora está siendo coordinado por su pareja, Stef, quien es contable y está ayudando a ordenar la contabilidad.