Teatros de Barcelona, plateas de Madrid
La capital y la Ciudad Condal acogerán estrenos y propuestas escénicas que pretenden devolver la normalidad (y el público) a los grandes teatros y salas independientes
10 septiembre, 2021 00:00Este año 2021 comenzó --como pronosticó el actor y director teatral Lluís Homar-- con muchas incertidumbres, viviendo “el día a día, siempre con sobresaltos”. Durante mucho tiempo ha sido casi imposible programar espectáculos de artes escénicas y los cambios de normativa a nivel estatal y entre comunidades autónomas obligaban a continuas reestructuraciones de las programaciones en los teatros. Si bien es cierto que en el primer semestre del año el telón nunca se bajó y los actores continuaron subiendo al escenario, únicamente ahora es posible volver a hablar de una temporada teatral sin temor a cancelaciones.
El mundo del teatro comienza con ganas esta nueva etapa . No hay mejor prueba que la inversión de casi 6 millones de euros que ha realizado el grupo teatral Focus, cuyo presidente, Daniel Martínez, anunció este mes de septiembre que harán "el mayor esfuerzo de producción artística de su historia” con veinte montajes propios y ocho coproducciones, a las que hay que sumar cuarenta producciones externas que se estrenarán en sus salas. Martínez sostiene que ha llegado el momento de “cerrar esta etapa aciaga” dando “una respuesta radical a la crisis” provocada por la pandemia. Precisamente con esta actitud han comenzado a trabajar los principales teatros de Barcelona y Madrid, con apuestas capaces de volver a llenar el patio de butacas.
Los escenarios de Barcelona
La capital catalana no podía comenzar mejor su curso teatral: Emma Vilarasau se sube junto a Nausicaa Bonnín al escenario del Teatro Goya para representar, dirigidas por la actriz y directora Sílvia Munt, Eva contra Eva, adaptación de Eva al desnudo, la película dirigida y escrita por Joseph L. Mankiewicz a partir de un relato de Mary Orr y protagonizada por Bette Davis y Anne Baxter. A Vilarasau la volveremos a ver dirigida por Josep Maria Mestres en el Teatre Villarroel porque será la protagonista de L’oreneta, escrita por el Premio Nacional de Literatura Dramática Guillem Clua a raíz del atentado en la sala LGTBI Pulse en la ciudad de Orlando.
No muy lejos de ahí, en el Teatre Condal, Eduard Farelo da vida al famoso investigador Hercules Poirot, creado por Agatha Christie en Assassinat a l’Orient Exprés. El Teatre Romea inicia el mes con varios platos fuertes. Primero: Julio Manrique adapta Carrer Robadors, la novela del escritor francés residente en Barcelona Mathias Enard, que en 2015 conseguía el Premio Goncourt por Brújula (Literatura Random House). La obra, que está dirigida por el propio Manrique y que se estrenó el pasado mes de julio en el Festival Grec, está ambientada en el barrio barcelonés de El Raval durante las manifestaciones del 15M y su protagonista es un joven inmigrante proveniente de Tánger, interpretado por el viguetense Moha Amazian.
Segundo impacto: el cineasta Agustí Villaronga dirige y adapta la La casa dels noms, novela del irlandés Colm Toibín que, como ya hizo con la Virgen María en El testamento de María, se acerca al personaje clásico de Clitemnestra para profundizar en su dimensión humana. Asimismo, en el mes de octubre regresa Señora de rojo sobre fondo gris, la aplaudida adaptación de la novela de Miguel Delibes protagonizada por un brillante José Sacristán. En noviembre veremos a Josep Maria Pou interpretando Viejo amigo Cicerón, pieza escrita por Ernesto Caballero, una obra dirigida por Mario Gas que fue estrenada en el pasado Festival de Mérida. Y tras el emperador romano, llega el turno de Samuel Beckett: Sergi Belbel se enfrenta a una de las obras más complejas del escritor y dramaturgo irlandés, Final de partida.
La Villarroel levanta el telón con Començar, obra del dramaturgo británico David Eldridge. Pau Carrió dirigirá a Mar Ulldemolins y a David Verdaguer, que en 2017 se alzaba por el Goya a mejor actor de reparto por su papel en Estiu 1993. Los actores interpretan a dos jóvenes que se conocen tras una fiesta y deben decidir qué hacer: podrían irse a la cama y no volverse a ver o, quizás, están a punto de iniciar una relación.
El Teatre Lliure de Gràcia abre esta temporada reponiendo Bonus Track la última obra de la dramaturga y cineasta Carol López, que aquí reflexiona sobre la soledad y la falta de comunicación en una sociedad en la cual cualquier intercambio tiene que desarrollarse a través de una pantalla. En la sede de Montjuïc, a partir de noviembre, se podrá ver L’oncle Vània, una de las piezas más relevantes de Txekov y que se estrenó por primera vez en 1899. Llega al Lliure bajo la dirección del lituano Oskaras Koršunovas y con intérpretes de la talla de Julio Manrique, Lluís Marco o Carme Sansa. En febrero, Òscar Carrió llevará al escenario de la sala Fabià Puigserver, Crim i càstig, adaptación de la homónima novela de Dostoievski. Roser Batalla, Pol López, Carlota Olcina y Oriol Guinart darán vida a algunos de los personajes creados por el novelista ruso.
En la Sala Beckett septiembre comienza con un homenaje al dramaturgo catalán Josep Maria Benet i Jornet, fallecido el 6 de abril de 2000. El director Toni Casares recupera Descripció d’un paisatge, una de sus obras más significativas. En una ciudad mediterránea imaginaria, Benet i Jornet nos presenta al jefe de un Estado totalitario que ha decidido evolucionar hacia un sistema democrático. En este contexto, las dos hijas de un disidente político regresan del exilio con miedo, pero también con deseos de venganza.
En la Rambla, el Teatre Poliorama comienza retoms su actividad con Juan Echanove, que se pone en la piel del dictador Trujillo en la adaptación teatral firmada por Natalio Grueso de La fiesta del Chivo, la novela del escritor peruano Mario Vargas Llosa. Echanove, que lleva dos años de gira, está dirigido por el cineasta Carlos Saura. En la Plaça de les Arts, el Teatre Nacional de Catalunya también sube el telón y lo hace con La Víctor C. una obra dirigida por Carme Portaceli, que ofrece una nueva mirada sobre la autora de Solitud. En noviembre, la escritora catalana volverá a ser protagonista con Infanticida, una ópera eléctrica a partir de sus textos. En diciembre, en la Sala Gran llegará Carmen Machi para protagonizar Prostitución, una obra de Andrés Lima y Albert Boronat que cuenta las distintas experiencias de varias mujeres prostitutas. Ese mismo mes, en la Sala Petita, Jumon Erra dirige El nadador del mar secret, adaptación que firma el propio Erra de la novela de William Kotzwinkle quien cuenta el difícil nacimiento de un niño a través del testimonio de su padre.
Madrid y las grandes damas
La capital afronta el nuevo curso con el regreso de una de las grandes damas de la escena: Lola Herrera llega al escenario del Teatro Bellas Artes para volver a dar vida a la viuda creada por Miguel Delibes en Cinco horas con Mario. En diciembre, Luis Luque dirige a Ana Torrent, Alicia Borrachero y Jorge Calvo en Las Criadas de Jean Genet, mientras que en marzo María Ruiz dirige a Clara Sanchis en la adaptación del famoso ensayo feminista de Virginia Woolf, Una habitación propia. El Teatro Reina Victoria ha comenzado el curso con Pepe Viyuela como Tartufo, el emblemático personaje de Molière, bajo la dirección de Ernesto Caballero.
En noviembre, Sílvia Munt deja Barcelona y lleva a la sala madrileña con Eva contra Eva, esta vez protagonizada por Ana Belén, Mel Salvatierra, Javier Albalá, Manuel Morón y Ana Goya. En el Teatro María Guerrero, la directora Marta Pazos se enfrentará en noviembre al inacabado texto de Federico García Lorca, Comedia sin título. En el Teatro Valle-Inclán Josep Maria Mestres se encargará de llevar a escena Los últimos Gondra (memorias vascas), la obra de Borja Ortiz de Gondra en la que cuenta la experiencia alucinatoria de un hombre que, en la casa familiar “recuerda, sueña o inventa el momento de su muerte, rodeado de antepasados vengativos que le reprochan lo que ha hecho con la memoria familiar.”
En el Teatro La Abadía, el 30 de septiembre, su director José Luis Gómez estrena Mio Cid, un espectáculo dirigido e interpretado por el propio Gómez que propone una “lectura moderna del Cantar”, poniendo “cuerpo y voz a las palabras germinales de la literatura hispánica”. Pocos días después, el 7 de octubre se estrena Makers, una obra escrita a seis manos por Agustín Fernández Mallo, Rodrigo García y Óscar Gómez Mata, que también la dirige. Se trata de una pieza teatral que “mezcla lo poético y lo filosófico, en una especie de manual para sobrevivientes que trata de aportar soluciones a nuestro tránsito en la realidad”.
El Teatro Español, por su parte, comienza el curso con un personaje clásico. En Edipo. A través de las llamas, el dramaturgo Paco Bezerra y el director Luis Luque nos presentan el personaje de Sófocles que acaba de despertarse “al escuchar la voz de una extraña presencia; un hombre, que, oculto bajo un casco de metal, comienza a hablarle acerca de un monstruo, una ciudad y una recompensa”. En el mes de noviembre, en la Sala Margarita Xirgú, Jesús Arbúes adapta y dirige la novela La lluvia amarilla de Julio Llamazares, mientras que en la Sala Principal José María Cámara y Juan Carlos Rubio imaginan un encuentro Concha Piquer y Federico García Lorca en En tierra extraña.
En los Teatros del Canal, el curso comenzó el pasado 2 de septiembre con Lope de Vega: José Luis Alonso de Santos adaptó y dirigió Fiesta de farsantes, espectáculo que duró solamente tres días. En octubre llega La Gioia (La dicha); en italiano con subtítulos en castellano, un espectáculo de la compañía Pippo DelBono con “payasos tristes y danzas macabras, almas desaforadas, que gritan dando rienda suelta a su locura antisocial, preceden al estallido de color final que llena el escenario de flores”.
La Compañía Nacional de Teatro Clásico, en su Sala Principal estrena Antonio y Cleopatra de Shakespeare dirigida por José Carlos Plaza con Ana Belén y Ernesto Arias. También ahí podrá verse Lo fingido verdadero de Lope de Vega bajo la dirección de Lluís Homar, director a su vez de la Compañía, y con María Besant e Israel Elejalde en el reparto. En la Sala Tirso de Molina, José Gabriel López Antuñano presenta Fuenteovejuna. El coraje de las mujeres, una adaptación del clásico de Lope de Vega ambientado en Costa de Marfil.
El dramaturgo catalán Xavier Albertí tiene previsto estrenar Caravaggio, Vermeer y Velázquez, obra que dirige e interpreta: solo en el piano, Albertí interpretará piezas del siglo XVII y se adentrará en ese convulso siglo a través de tres cuadros de tres grandes maestros de la pintura barroca: Caravaggio, Vermeer y Velázquez. Como homenaje por el centenario de su nacimiento, el Teatro Fernán Gómez centrará su programación del último trimestre del año a repasar la obra del escritor, actor, director y académico que le da nombre.
En la Sala Guirau Ramón Barea dirigirá una adaptación, firmada por Ignacio del Moral, de El viaje a ninguna parte, mientras que José Sacristán adaptará El hijo de la cómica, dramaturgia a partir del primer volumen de memorias de Fernán Gómez, El tiempo amarillo. Por su parte, el Teatro del Barrio comenzó el mes con Los días ajenos, un espectáculo de voces y memorias creado e interpretado por Bob Pop. En lo que queda del mes, Tolo Ferrà dirige 1940 Manuscrito encontrado en el olvido, pieza inspirada en el segundo capítulo de Los girasoles ciegos, la novela de Alberto Méndez. En diciembre, se podrá ver Catalina, la primera obra de Iniciativa Sexual Femenina, de la que forma parte la escritora Cristina Morales, que obtuvo en 2018 el Premio Herralde de novela con Lectura fácil. Elisa Keisanen, Élise Moreau y la propia Morales son las intérpretes de esta obra que trata sobre los modos en que ellas, como mujeres, dan y reciben placer en tanto que "mujeres sistemáticamente asediadas por el civismo heterosexual y monógamo".
Este año 2021 comenzó --como pronosticó el actor y director teatral Lluís Homar-- con muchas incertidumbres, viviendo “el día a día, siempre con sobresaltos”. Durante mucho tiempo ha sido casi imposible programar espectáculos de artes escénicas y los cambios de normativa a nivel estatal y entre comunidades autónomas obligaban a continuas reestructuraciones de las programaciones en los teatros. Si bien es cierto que en el primer semestre del año el telón nunca se bajó y los actores continuaron subiendo al escenario, únicamente ahora es posible volver a hablar de una temporada teatral sin temor a cancelaciones.
El mundo del teatro comienza con ganas esta nueva etapa . No hay mejor prueba que la inversión de casi 6 millones de euros que ha realizado el grupo teatral Focus, cuyo presidente, Daniel Martínez, anunció este mes de septiembre que harán "el mayor esfuerzo de producción artística de su historia” con veinte montajes propios y ocho coproducciones, a las que hay que sumar cuarenta producciones externas que se estrenarán en sus salas. Martínez sostiene que ha llegado el momento de “cerrar esta etapa aciaga” dando “una respuesta radical a la crisis” provocada por la pandemia. Precisamente con esta actitud han comenzado a trabajar los principales teatros de Barcelona y Madrid, con apuestas capaces de volver a llenar el patio de butacas.
Los escenarios de Barcelona
La capital catalana no podía comenzar mejor su curso teatral: Emma Vilarasau se sube junto a Nausicaa Bonnín al escenario del Teatro Goya para representar, dirigidas por la actriz y directora Sílvia Munt, Eva contra Eva, adaptación de Eva al desnudo, la película dirigida y escrita por Joseph L. Mankiewicz a partir de un relato de Mary Orr y protagonizada por Bette Davis y Anne Baxter. A Vilarasau la volveremos a ver dirigida por Josep Maria Mestres en el Teatre Villarroel porque será la protagonista de L’oreneta, escrita por el Premio Nacional de Literatura Dramática Guillem Clua a raíz del atentado en la sala LGTBI Pulse en la ciudad de Orlando.
No muy lejos de ahí, en el Teatre Condal, Eduard Farelo da vida al famoso investigador Hercules Poirot, creado por Agatha Christie en Assassinat a l’Orient Exprés. El Teatre Romea inicia el mes con varios platos fuertes. Primero: Julio Manrique adapta Carrer Robadors, la novela del escritor francés residente en Barcelona Mathias Enard, que en 2015 conseguía el Premio Goncourt por Brújula (Literatura Random House). La obra, que está dirigida por el propio Manrique y que se estrenó el pasado mes de julio en el Festival Grec, está ambientada en el barrio barcelonés de El Raval durante las manifestaciones del 15M y su protagonista es un joven inmigrante proveniente de Tánger, interpretado por el viguetense Moha Amazian.
Segundo impacto: el cineasta Agustí Villaronga dirige y adapta la La casa dels noms, novela del irlandés Colm Toibín que, como ya hizo con la Virgen María en El testamento de María, se acerca al personaje clásico de Clitemnestra para profundizar en su dimensión humana. Asimismo, en el mes de octubre regresa Señora de rojo sobre fondo gris, la aplaudida adaptación de la novela de Miguel Delibes protagonizada por un brillante José Sacristán. En noviembre veremos a Josep Maria Pou interpretando Viejo amigo Cicerón, pieza escrita por Ernesto Caballero, una obra dirigida por Mario Gas que fue estrenada en el pasado Festival de Mérida. Y tras el emperador romano, llega el turno de Samuel Beckett: Sergi Belbel se enfrenta a una de las obras más complejas del escritor y dramaturgo irlandés, Final de partida.
La Villarroel levanta el telón con Començar, obra del dramaturgo británico David Eldridge. Pau Carrió dirigirá a Mar Ulldemolins y a David Verdaguer, que en 2017 se alzaba por el Goya a mejor actor de reparto por su papel en Estiu 1993. Los actores interpretan a dos jóvenes que se conocen tras una fiesta y deben decidir qué hacer: podrían irse a la cama y no volverse a ver o, quizás, están a punto de iniciar una relación.
El Teatre Lliure de Gràcia abre esta temporada reponiendo Bonus Track la última obra de la dramaturga y cineasta Carol López, que aquí reflexiona sobre la soledad y la falta de comunicación en una sociedad en la cual cualquier intercambio tiene que desarrollarse a través de una pantalla. En la sede de Montjuïc, a partir de noviembre, se podrá ver L’oncle Vània, una de las piezas más relevantes de Txekov y que se estrenó por primera vez en 1899. Llega al Lliure bajo la dirección del lituano Oskaras Koršunovas y con intérpretes de la talla de Julio Manrique, Lluís Marco o Carme Sansa. En febrero, Òscar Carrió llevará al escenario de la sala Fabià Puigserver, Crim i càstig, adaptación de la homónima novela de Dostoievski. Roser Batalla, Pol López, Carlota Olcina y Oriol Guinart darán vida a algunos de los personajes creados por el novelista ruso.
En la Sala Beckett septiembre comienza con un homenaje al dramaturgo catalán Josep Maria Benet i Jornet, fallecido el 6 de abril de 2000. El director Toni Casares recupera Descripció d’un paisatge, una de sus obras más significativas. En una ciudad mediterránea imaginaria, Benet i Jornet nos presenta al jefe de un Estado totalitario que ha decidido evolucionar hacia un sistema democrático. En este contexto, las dos hijas de un disidente político regresan del exilio con miedo, pero también con deseos de venganza.
En la Rambla, el Teatre Poliorama comienza retoms su actividad con Juan Echanove, que se pone en la piel del dictador Trujillo en la adaptación teatral firmada por Natalio Grueso de La fiesta del Chivo, la novela del escritor peruano Mario Vargas Llosa. Echanove, que lleva dos años de gira, está dirigido por el cineasta Carlos Saura. En la Plaça de les Arts, el Teatre Nacional de Catalunya también sube el telón y lo hace con La Víctor C. una obra dirigida por Carme Portaceli, que ofrece una nueva mirada sobre la autora de Solitud. En noviembre, la escritora catalana volverá a ser protagonista con Infanticida, una ópera eléctrica a partir de sus textos. En diciembre, en la Sala Gran llegará Carmen Machi para protagonizar Prostitución, una obra de Andrés Lima y Albert Boronat que cuenta las distintas experiencias de varias mujeres prostitutas. Ese mismo mes, en la Sala Petita, Jumon Erra dirige El nadador del mar secret, adaptación que firma el propio Erra de la novela de William Kotzwinkle quien cuenta el difícil nacimiento de un niño a través del testimonio de su padre.
Madrid y las grandes damas
La capital afronta el nuevo curso con el regreso de una de las grandes damas de la escena: Lola Herrera llega al escenario del Teatro Bellas Artes para volver a dar vida a la viuda creada por Miguel Delibes en Cinco horas con Mario. En diciembre, Luis Luque dirige a Ana Torrent, Alicia Borrachero y Jorge Calvo en Las Criadas de Jean Genet, mientras que en marzo María Ruiz dirige a Clara Sanchis en la adaptación del famoso ensayo feminista de Virginia Woolf, Una habitación propia. El Teatro Reina Victoria ha comenzado el curso con Pepe Viyuela como Tartufo, el emblemático personaje de Molière, bajo la dirección de Ernesto Caballero.
En noviembre, Sílvia Munt deja Barcelona y lleva a la sala madrileña con Eva contra Eva, esta vez protagonizada por Ana Belén, Mel Salvatierra, Javier Albalá, Manuel Morón y Ana Goya. En el Teatro María Guerrero, la directora Marta Pazos se enfrentará en noviembre al inacabado texto de Federico García Lorca, Comedia sin título. En el Teatro Valle-Inclán Josep Maria Mestres se encargará de llevar a escena Los últimos Gondra (memorias vascas), la obra de Borja Ortiz de Gondra en la que cuenta la experiencia alucinatoria de un hombre que, en la casa familiar “recuerda, sueña o inventa el momento de su muerte, rodeado de antepasados vengativos que le reprochan lo que ha hecho con la memoria familiar.”
En el Teatro La Abadía, el 30 de septiembre, su director José Luis Gómez estrena Mio Cid, un espectáculo dirigido e interpretado por el propio Gómez que propone una “lectura moderna del Cantar”, poniendo “cuerpo y voz a las palabras germinales de la literatura hispánica”. Pocos días después, el 7 de octubre se estrena Makers, una obra escrita a seis manos por Agustín Fernández Mallo, Rodrigo García y Óscar Gómez Mata, que también la dirige. Se trata de una pieza teatral que “mezcla lo poético y lo filosófico, en una especie de manual para sobrevivientes que trata de aportar soluciones a nuestro tránsito en la realidad”.
El Teatro Español, por su parte, comienza el curso con un personaje clásico. En Edipo. A través de las llamas, el dramaturgo Paco Bezerra y el director Luis Luque nos presentan el personaje de Sófocles que acaba de despertarse “al escuchar la voz de una extraña presencia; un hombre, que, oculto bajo un casco de metal, comienza a hablarle acerca de un monstruo, una ciudad y una recompensa”. En el mes de noviembre, en la Sala Margarita Xirgú, Jesús Arbúes adapta y dirige la novela La lluvia amarilla de Julio Llamazares, mientras que en la Sala Principal José María Cámara y Juan Carlos Rubio imaginan un encuentro Concha Piquer y Federico García Lorca en En tierra extraña.
En los Teatros del Canal, el curso comenzó el pasado 2 de septiembre con Lope de Vega: José Luis Alonso de Santos adaptó y dirigió Fiesta de farsantes, espectáculo que duró solamente tres días. En octubre llega La Gioia (La dicha); en italiano con subtítulos en castellano, un espectáculo de la compañía Pippo DelBono con “payasos tristes y danzas macabras, almas desaforadas, que gritan dando rienda suelta a su locura antisocial, preceden al estallido de color final que llena el escenario de flores”.
La Compañía Nacional de Teatro Clásico, en su Sala Principal estrena Antonio y Cleopatra de Shakespeare dirigida por José Carlos Plaza con Ana Belén y Ernesto Arias. También ahí podrá verse Lo fingido verdadero de Lope de Vega bajo la dirección de Lluís Homar, director a su vez de la Compañía, y con María Besant e Israel Elejalde en el reparto. En la Sala Tirso de Molina, José Gabriel López Antuñano presenta Fuenteovejuna. El coraje de las mujeres, una adaptación del clásico de Lope de Vega ambientado en Costa de Marfil.
El dramaturgo catalán Xavier Albertí tiene previsto estrenar Caravaggio, Vermeer y Velázquez, obra que dirige e interpreta: solo en el piano, Albertí interpretará piezas del siglo XVII y se adentrará en ese convulso siglo a través de tres cuadros de tres grandes maestros de la pintura barroca: Caravaggio, Vermeer y Velázquez. Como homenaje por el centenario de su nacimiento, el Teatro Fernán Gómez centrará su programación del último trimestre del año a repasar la obra del escritor, actor, director y académico que le da nombre.
En la Sala Guirau Ramón Barea dirigirá una adaptación, firmada por Ignacio del Moral, de El viaje a ninguna parte, mientras que José Sacristán adaptará El hijo de la cómica, dramaturgia a partir del primer volumen de memorias de Fernán Gómez, El tiempo amarillo. Por su parte, el Teatro del Barrio comenzó el mes con Los días ajenos, un espectáculo de voces y memorias creado e interpretado por Bob Pop. En lo que queda del mes, Tolo Ferrà dirige 1940 Manuscrito encontrado en el olvido, pieza inspirada en el segundo capítulo de Los girasoles ciegos, la novela de Alberto Méndez. En diciembre, se podrá ver Catalina, la primera obra de Iniciativa Sexual Femenina, de la que forma parte la escritora Cristina Morales, que obtuvo en 2018 el Premio Herralde de novela con Lectura fácil. Elisa Keisanen, Élise Moreau y la propia Morales son las intérpretes de esta obra que trata sobre los modos en que ellas, como mujeres, dan y reciben placer en tanto que "mujeres sistemáticamente asediadas por el civismo heterosexual y monógamo".