¿Cuánto cuesta un anillo de luz?

A la hora de acercarse a un establecimiento de electrónica y tecnología, es frecuente en estos días ver junto a los estantes de teléfonos móviles un aro luminoso que viene junto con un trípode. No es un artilugio de lo más extraño y sí un producto que cada vez se ha puesto más de moda sobre todo en el caso de aquellos que se pasan horas en las redes sociales y quieren ver mejorado el aspecto de los contenidos que suben.

El aro de luz es, por tanto, una herramienta de iluminación formada por varios luces LED que hasta hace poco se usaba para mejorar el aspecto de las instantáneas que se tomaban en fotografía macro y dar algo más de luz a esos sujetos u objetos que había delante de la cámara. Ahora, su uso se ha extendido y suele ser un elemento imprescindible para aquellos que hagan sus pinitos en Instagram, ya sea de forma profesional o más bien amateur. 

¿Cuáles son sus características?

Este tipo de herramientas tecnológicas son muy sencillas de manejar, por lo que todo usuario puede aprovecharse las ventajas que ofrece gracias a sus características. Al tratarse de lámparas que emiten una luz de manera continua se puede ver en todo momento el efecto de los cambios que se hagan en el objetivo a fotografiar y no es necesario hacer varias tomas de prueba para ver cuál queda mejor. De la misma manera, al funcionar con luces LED permite controlar tanto la intensidad como la temperatura del color (algo esencial para aquellos más mañosos con la fotografía). 

Entre sus aspectos técnicos también merece la pena destacar que son más seguras que otro tipo de bombillas profesionales en este caso ya que no se calientan tanto, aparte de que son más duraderas. Por último y gracias a su forma circular, la iluminación que se obtiene es uniforme en todo momento por lo que es muy eficaz cuando se trata de hacer un vídeo de belleza (en los numerosos tutoriales de maquillaje que circulan por las redes sociales) en el que se necesita que todo el rostro tenga la misma luz. 

Sus usos

Además de mejorar el escenario que se va a fotografía o grabar, especialmente cuando la luz ambiente es más bien escasa, un aro de luz es una herramienta que no puede faltar en aquellas instantáneas o vídeos de peluquería o de pequeño detalle como por ejemplo mostrar cómo se hace el paso a paso de una manicura. Aparte de este uso, este elemento resulta muy aconsejable cuando uno se quiere sacar un selfie y mostrar la mejor de sus caras. 

Manicura, para cuyo tutorial online se utiliza un anillo de luz / Alehandra 13 en PIXABAY

También las marcas hacen suyo este tipo de accesorio de iluminación en sus proyectos digitales y de marketing, ya que aportan un plus de profesionalidad a la hora de inmortalizar todo tipo de productos, además de servir para hacer videollamadas, vídeos por streaming para contar las bondades de un servicio o bien transmisiones en directo de un evento o una intervención pública. 

Su precio

En este caso no existe un coste estándar por un anillo de luz ya que su precio varía en función de su tamaño (expresado en pulgadas), la potencia luminosa, así como el grado de temperatura que alcance y, por último, si cuenta con una opción para regular su altura. Con estos condicionantes se pueden encontrar (en establecimientos de tecnología, electrónica y grandes superficies) desde modelos muy básicos que apenas llegan a los 10 euros a otros más caros y profesionales que rondan los 100. 

En este último caso, además de esta herramienta suelen venir otro tipo de accesorios para mejorar el resultado de la fotografía o vídeo en cuestión como es el caso de un soporte, distintos filtros, adaptador de enchufe, soporte para el mismo smartphone y una bolsa de transporte. Además, este tipo de modelos más sofisticados incluso cuentan con conectividad por Bluetooth.

¿Cómo utilizar un aro de luz?

A la hora de empezar a usar un anillo de luz lo más aconsejable es que al principio se ajuste con una intensidad media que posteriormente ir modificándola en función de las necesidades de iluminación. Como es lógico, la forma correcta de colocarlo es frente a la persona o el objeto que se va a fotografiar y colocar el móvil o la cámara de fotos en mitad del círculo con la ayuda del trípode. Esta es la posición más común y frecuente, pero este dispositivo electrónico ofrece varias opciones con la idea de cambiar de encuadre. 

Si, por ejemplo, se va a hacer un tutorial de belleza es importante acercar esta luz y ubicarlo a la altura de los ojos para, de esta forma, conseguir una iluminación suave e uniforme en todo el rostro. Eso sí, hay que tener cuidado si la persona usa gafas ya que se pueden producir reflejos. Para evitarlo basta con alejarlo o inclinarlo un poco. Tras estos pasos iniciales solo queda configurar la temperatura del color (en ocasiones incluso simulando que es de día), así como la intensidad de brillo si se quiere que los colores se noten con mayor nitidez.