La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, prosigue su proyecto de ordenación de las terrazas de la ciudad / CG

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, prosigue su proyecto de ordenación de las terrazas de la ciudad / CG

Artes

Colau reorganiza las terrazas de Sant Andreu

Las mesas de la plaza de Masadas se colocarán bajo los porches, lo que mejora la visión integral de las fachadas neoclásicas

8 enero, 2017 11:17

La Comisión de Gobierno del Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado la distribución de las terrazas de la plaza de Masadas, en el distrito de Sant Andreu. La normativa establece los criterios de ordenación de los veladores que se podrán instalar en este ámbito, y prevé hacerlas compatibles con el disfrute del espacio público por parte de los vecinos y vecinas.

La idea es ubicar las 40 terrazas y 160 sillas que hay actualmente en la plaza en la zona porticada. En estos espacios se ha definido un máximo de 9 zonas ocupables con un máximo de 6 mesas y 24 sillas para cada una de ellas. Con esta distribución, las mesas ocuparán un máximo del 6,51% del espacio público de la plaza.

Los objetivos de esta distribución previa, que según el consistorio se ha compartido y consensuado con las entidades vecinales y actores de la plaza, son garantizar el flujo de peatones, el acceso a edificios y espacios públicos y la visión de los edificios públicos, patrimoniales y de interés ciudadano y turístico; procurar un ordenamiento global; evitar la sobrecarga de usos, y preservar el carácter propio de la plaza.

Liberación de la plaza

Bajo estos criterios, todo el espacio central de la plaza se liberará definitivamente y quedará libre de terrazas. Esto permitirá que la imagen y el uso de la plaza conserven su configuración y capacidad actual, y se garantizará la percepción visual íntegra de las fachadas neoclásicas.

Además, se liberarán los accesos desde las calles que conducen a la plaza, por lo que no habrá ningún elemento que interrumpa la circulación de los peatones ni las visuales que atraviesan los pórticos. También se reservará un espacio libre frente a los elementos de mobiliario urbano, como bancos y fuentes, y se separarán las terrazas de los accesos a los inmuebles. Y las mamparas, jardineras y otros elementos admitidos se colocarán de manera que se eviten las barreras visuales.