El Starbucks de la avenida Diagonal, tras las protestas propalestinas
Un manifestante propalestino se cuela en el Starbucks de la Diagonal y roba la caja de las propinas
Cuando reina el caos, como sucedió durante la tarde de este miércoles en la Diagonal de Barcelona por las violentas protestas propalestinas, es mucho más fácil entrar en un Starbucks, robar la caja de las propinas y pasar desapercibido.
Eso pensó un joven manifestante encapuchado y sin camiseta al pasar por delante del famoso local, que previamente había sido reventado, como tantos otros, dejando un boquete en el cristal. "Mira que no haya policía", le decía a su compañero, que le advertía de que se diera prisa, que en efecto los Mossos d'Esquadra bajaban la avenida entre los disturbios.
Un manifestante propalestino, colándose en el Starbucks de la Diagonal
El joven entró sin pensarlo. No había tiempo para preparar un frapuccino macchiato pero sí para aferrarse a un recipiente de cristal del mostrador, lleno de monedas pequeñas, y salir por patas. Tampoco había margen ni para encender la luz ni para manipular la caja, por lo que el joven parecía satisfecho con su hallazgo, que poco le duró.
La caja de las propinas, en el suelo
Al salir, con la policía practicamente a la altura de la cafetería, se vio obligado a correr. Y a penas unos pasos hacia adelante, con un agente pisándole los talones, optó por tirar la caja a la acera y centrarse en el sprint que evitaría, debió pensar, su detención, dejando la acera llena de céntimos que otros manifestantes jóvenes como él, sin conocer la peculiar historia, se llevarían a casa.
