
La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero EUROPA PRESS
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María Jesús Montero está dispuesta a no arrugarse. Lleva a gala ser vicepresidenta y ministra de Hacienda, al tiempo que líder de los socialistas andaluces.
La número dos del PSOE afiló las uñas en una entrevista en Espejo Público de Antena 3 animando a "leer el acuerdo de PSC y ERC", para añadir que "contó con el apoyo de la ejecutiva federal".
"Es un acuerdo que da respuesta a su vocación de autogobierno y apuesta por aumentar la recaudación", dijo. Y añadió algo más que nunca se dice: que pasa por una "aportación de solidaridad para la equiparación de la calidad de los servicios para todos los españoles”.
La vicepresidenta apostó también por un “mecanismo corrector” que haga imposible la actual situación de ser "la tercera en aportar y la duodécima en recibir”. Y aprovechó la coyuntura para defender “normalizar la convivencia y no por el enfrentamiento entre territorios”, según sus palabras.
“Lo de menos es dónde se recauden los impuestos, sino la calidad de los servicios”, afirmó, mientras cargaba contra el PP por votar contra los 10.000 millones para las comunidades, algo que volverá al Congreso, “y veremos qué vota el PP”.
Asimismo, anunció para final de mes la presentación de la quita en el Consejo de Política Fiscal para “reducir la deuda y liberar recursos”. De momento, lleva con gallardía los dos sombreros: vicepresidenta y candidata apostando por un nuevo sistema de financiación. Con Cataluña, of course.