Lamine Yamal solo tiene 17 años, pero afronta los problemas mejor que Vinicius Júnior, que tiene 24. En el clásico del sábado pasado (0-4), algunos individuos insultaron al extremo del Barça --además de a Raphinha y a Ansu Fati-- por su color de piel y procedencia. La respuesta de Lamine fue no hacer caso a los ignorantes. Le bastó con una sonrisa irónica.
El Barça celebró los goles en uno de los córneres del Santiago Bernabéu, donde se oyeron insultos como "negros de mierda", "puto negro", "vete a vender pañuelos a un semáforo" o "puto moro". Lamine Yamal, después de recibir el Trofeo Kopa como mejor jugador joven del planeta, explicó que, en ese momento, no escuchó nada.
Sin embargo, mostró que su postura es muy diferente a la de Vinicius Júnior, que identificó a los sujetos que hicieron el gesto de un mono en Mestalla. Yamal deja a la justicia trabajar, tras la denuncia de la Liga, que ya ha sido puesta ante la policía nacional.
"Cuatro tonterías no importan"
"Al final, el que está en el campo soy yo. El que está celebrando soy yo también. Pues que te digan aficionados de fuera cuatro tonterías no te tiene que importar. Es al revés. Cuando te dicen eso es porque algo estás haciendo muy bien", explicó Lamine en el Théatre du Chatelet de París.
"Cuando llegué al vestuario es cuando vi el vídeo y no me importó mucho, la verdad. Este tipo de cosas no tienen sitio en nuestro fútbol. En mi opinión, no deberían de regresar a un campo de fútbol, pero pienso en el 0-4, la victoria de mi equipo y en el siguiente partido", relató un Lamine Yamal con una calma impropia de un chico de 17 años.
La Liga ya ha aportado nuevas imágenes a la brigada provincial de información de Madrid. El Real Madrid también lo ha hecho. Trabaja para identificar a los sujetos. Vinicius se solidarizó con Ansu, Raphinha y el propio Lamine Yamal.