Anderson Luis de Souza, popularmente conocido como Deco, era un futbolista con mucho carácter y talento. Nunca se arrugaba y fue el mejor aliado de Ronaldinho en el Barça. Ahora, director de fútbol, debe ser mucho más paciente. Máximo ejecutivo deportivo, no lo tiene fácil en un club con una deuda bruta que supera los 1.000 millones de euros y que tiene el límite salarial excedido. Sustituto de Mateu Alemany, le espera un verano muy caliente e intenso.
El Barça actual no tiene margen de error. Es un club que vive al día, con muchas urgencias. Acostumbrado a fichar a la estrella del momento, la entidad barcelonista se agarra a la cantera para ilusionarse con títulos. Hoy no forma parte de la élite europea y Deco sabe que antes de fichar a futbolistas de primer nivel deberá sacrificar alguna pieza. Y no será una pieza cualquiera.
Traspaso a la vista
Ronald Araujo o Raphinha podrían aliviar la delicada situación económica del Barça con un traspaso millonario. Ya sea al Bayern, al Chelsea, al Manchester United o a Arabia Saudí. Pero Deco deberá gestionar otras salidas, como las de Lenglet, Ansu Fati, Oriol Romeu, etcétera.
El Barça, por otra parte, busca un mediocentro y un extremo. El primero debería ser la prioridad. El club todavía no ha encontrado al sustituto de garantías de Sergio Busquets, un asunto que no es baladí para un equipo con una propuesta futbolística que se sustenta en el toque y el control del balón.
El mediocentro
Hace un año, Xavi Hernández pidió a Martín Zubimendi (Real Sociedad) y a Joshua Kimmich (Bayern de Múnich), pero Deco le comunicó que no había dinero. Ahora, Hansi Flick insiste en la contratación del polivalente jugador alemán, mientras que el director de fútbol también tiene buenos informes de Amadou Onana, del Everton.
Mikel Merino, autor del gol de la victoria de España contra Alemania en la Eurocopa, es el plan B, pero el jugador de la Real Sociedad es más interior que mediocentro. En el Barça, mientras, contemplan el ascenso al primer equipo de Marc Casadó y Marc Bernal.
Objetivo, Nico Williams
Menos necesario, pero más ilusionante es el posible fichaje de Nico Williams, el jugador más deseado por Laporta y la afición del Barça. Su precio está marcado: los 58 millones de euros de su cláusula de rescisión.
Jon Uriarte, presidente del Athletic, ya ha anunciado que no piensa negociar la venta de Nico Williams. No rebajará su precio ni aceptará el pago a plazos. Tampoco contempla la inclusión de Iñigo Martínez para abaratar su coste.
Casos pendientes
A Deco también le gusta Luis Díaz. El delantero colombiano, de 27 años, no tiene el desborde de Nico Williams, pero tiene más gol. Su valor de mercado, según Transfermarkt, es de 75 millones de euros.
Deco también deberá resolver los casos de Joao Cancelo y Joao Félix, jugadores del Manchester City y del Atlético de Madrid que no entran en los planes de Pep Guardiola y Simeone. El Barça solo prevé una nueva cesión por un año.
El director de fútbol del Barça también podría abordar el fichaje de Jeremie Frimpong, lateral muy ofensivo del Bayer Leverkusen que ha pedido Flick. Su precio es de 40 millones y Deco solo activaría dicha opción si le cuadran las cuentas a Laporta. Su jefe y el de un Barça en crisis al que le espera una temporada muy complicada.