El FC Barcelona ya puede dar, prácticamente, la temporada por finalizada. Los pupilos de Xavi Hernández solo se deben preocupar por agenciarse el segundo puesto en Liga para jugar la Supercopa de España el año que viene. A partir de aquí, todos los esfuerzos del club deben centrarse en el próximo mercado de traspasos. Y confeccionar una plantilla mejor. Aún hay algunos interrogantes, como en el caso de Éric García.
El Barça esperó fichar a una joven promesa, pero su rendimiento durante su primera temporada en el primer equipo no convenció. Ante la falta de minutos, la campaña pasada decidió salir cedido. El conjunto escogido fue el Girona de Míchel, un equipo que, por estilo, le ha ido como anillo al dedo. Lleva un total de 2.298 minutos. Su valor de mercado --según Transfermarkt-- ha subido de los 10 a los 15 millones.
¿Volverá al Barça?
Ahora, García debe dejar el Girona y volver a la capital catalana. Otra cosa es que vuelva a defender la camiseta. A priori, la posición de central está cubierta en Can Barça y los problemas con el Fair Play financiero juegan en contra del central nacido en Martorell. El club aún debe inscribir a Iñigo Martínez, por ejemplo, entre otros casos.
Éric García se muestra consciente de la situación. No descarta ni quedarse, ni volver a salir cedido. Recientemente, en una entrevista para el diario Sport, el defensa catalán afirmó que "tengo contrato, volveré cuando acabe la temporada y se hablará con el club para ver que es lo que hay".
Xavi no quería su cesión
Xavi se encontrará a un Éric García diferente, con más experiencia en la élite y minutos en un equipo que practica un estilo similar al del Barça. La decisión de salir del conjunto azulgrana fue del mismo jugador, apoyado por la cúpula directiva, que tenía la soga al cuello debido a la economía de la institución.
"Así es, Xavi no quería que saliese. Se dio en el último día por un tema de Fair Play, y yo tenía claro que si salía, era para ir al Girona", ha sentenciado el futbolista catalán. La próxima pretemporada dictará sentencia. Éric puede dar guerra, aunque los problemas financieros del club son los que decidirán si se queda, o no, en el Barça.
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