Joan Laporta es un presidente que tiene mucho peso en la planificación deportiva. Su pasión por el fútbol le hace trabajar mano a mano con Deco y Xavi Hernández en la planificación del FC Barcelona. En este sentido, el dirigente azulgrana tiene entre sus principales objetivos a un extremo que suba el nivel del ataque del primer equipo. Es un fichaje que ha intentado en el pasado, aunque todavía mantiene viva la esperanza de sellar dicha operación en el corto plazo.
Esas esperanzas de Laporta se fundamentan especialmente por una cumbre que puede definir el futuro de ese talentoso atacante. Se trata del joven Khvicha Kvaratskhelia, uno de los extremos más peligrosos de Europa. Es un jugador que gusta mucho a Jan, hasta el punto de haber tocado la puerta de su entorno para negociar su fichaje por el Barça. En el pasado no fue una posibilidad, pero se daría una nueva oportunidad a partir de las negociaciones con el Nápoles para definir su contrato.
Jules Koundé, en una disputa contra Kvaratskhelia en el Nápoles-Barça
Según la información de Calciomercato, el Nápoles quiere reunirse pronto con el agente de Kvaratskhelia para ampliar su contrato. El acuerdo actual finaliza el 30 de junio de 2027, pero la intención de la entidad presidida por Aurelio De Laurentiis busca llegar a un nuevo pacto que asegure la continuidad del extremo hasta mediados de 2029. Aunque la principal clave es el deseo de incluir una cláusula de 100 millones de euros.
Laporta quiere su fichaje
En función del resultado de esa cumbre, el FC Barcelona podría tener un panorama más claro sobre las posibilidades que existen para hacerse con los servicios de Khvicha Kvaratskhelia. En este sentido, Mamuka Jugeli, reconoció el pasado mes de febrero que el talentoso ha recibido el interés de los grandes clubes de Europa y que "en mayo se aclarará más".
Laporta quiere su fichaje. El problema del Barça es que necesitan regresar a la regla 1-1 del Fair Play para tener más posibilidades de fichar a jugadores de primer nivel. La prioridad es encontrar a un nuevo mediocentro, pero la incorporación de un extremo izquierdo también entra en los planes de la dirección deportiva.