El FC Barcelona ha superado la última prueba antes de la Champions League. La vuelta a la competición tras el parón de selecciones siempre supone un dolor de cabeza para el equipo azulgrana, pero en esta oportunidad lograron cumplir con el objetivo de sumar tres puntos (1-0) contra la UD Las Palmas, por lo que ahora el enfoque de los azulgranas está directamente en su siguiente rival: el Paris Saint-Germain.
A pesar de las dudas de comienzo de año, donde el Barça perdió los títulos de la Copa del Rey y la Supercopa de España, el conjunto de Xavi Hernández ha conseguido dar vuelta a la página y estar en un momento de forma que le permite soñar en grande en la competición continental. Sin embargo, existen dos claves que son las que acercan al FC Barcelona el escenario de sacar un buen resultado en el feudo del PSG el próximo 10 de abril.
Contundencia ofensiva
Xavi se mostró satisfecho por el resultado positivo, pero también fue crítico al señalar que nuevamente el equipo se ha quedado lejos de ser contundente en ataque. En este sentido, el entrenador egarense explicó en rueda de prensa "hemos fallado más goles de lo normal. La falta de efectividad nos hace sufrir más de la cuenta, como en anteriores partidos". "No meter el 2-0 nos ha hecho sufrir más", añadió.
No es la primera vez que el Barça muestra tantos problemas para definir los partidos. Muchas de las victorias se han definido por la mínima con el equipo sufriendo en los minutos finales. La excepción a la norma fue la última jornada contra el Atlético de Madrid, cuando golearon (0-3) de forma contundente en el Metropolitano. Ese es el camino que deben seguir los futbolistas culés si quieren conseguir un resultado favorable en la ida de los cuartos de final.
La buena noticia para Xavi es que en los recientes compromisos se ha dado el despertar ofensivo de algunos jugadores, como es el caso de un Raphinha que suma dos goles y dos asistencias en los último cinco encuentros de Liga. Lewandowski también ha dado signos de mejoría a lo largo de 2024 y Joao Félix tiene esos tramos de chispazos que pueden definir jugadas. Sin dejar de lado que el técnico recupera a Ferran Torres para la eliminatoria continental.
La firmeza defensiva
La otra clave que alimenta la esperanza del Barça de competir contra el PSG en París es la firmeza defensiva. Los último cinco partidos del equipo demuestran que la dinámica es realmente favorable, teniendo en cuenta que todos terminaron con la portería a cero. Esa resurrección de la primera línea se debe a la mejoría individual de piezas importantes como Jules Koundé y Ronald Araujo, pero también por la irrupción de Pau Cubarsí.
No obstante, el partido contra Las Palmas también debe servir de aprendizaje para el elenco de Xavi. Aún con la ventaja numérica por la expulsión de Álvaro Valles, la realidad es que el Barça tuvo minutos de desconexión en los minutos finales que pudieron representar un pinchazo bastante amargo en Montjuïc. De no ser por la poca contundencia de los dirigidos por Pimienta, el resultado habría sido muy diferente.
Esas desconexiones no se pueden permitir contra el PSG, debido a que enfrente tendrán atacantes que no van a desaprovechar tantas facilidades. No solo por la presencia de Kylian Mbappé, sino también por Ousmane Dembelé, Kolo Muani o Gonçalo Ramos. Por esa razón, el FC Barcelona necesita la máxima concentración posible en París de cara a llegar en las mejores condiciones a la vuelta que se jugará en Montjuïc el 16 de abril.
La certeza de la medular
Curiosamente, la mejor certeza que tiene Xavi antes de la Champions League es la mitad de cancha. A pesar de las lesiones de cracks de mucho peso en la plantilla como Gavi, Pedri o Frenkie de Jong, el resto de centrocampistas ha dado un paso adelante en las últimas semanas. Ante el Atlético y Las Palmas se ha visto una medular sólida con Ilkay Gundogan, Sergi Roberto y Fermín López, aunque se espera que para el cruce contra el PSG en París pueda estar nuevamente disponible Andreas Christensen para ser el del equilibrio.