El Barça es un club ciclotímico por definición. Pasa del éxtasis a la depresión, o viceversa, en menos de un día. Durante un partido, incluso. El 27 de enero, tras la derrota contra el Villarreal (3-5) en el Olímpic Lluís Companys, Xavi Hernández anunció que renunciaba al año de contrato que le quedaba a partir del 30 de junio. Joan Laporta y Deco, presidente y director de fútbol, respectivamente, iniciaron la búsqueda de un nuevo entrenador. Dos meses después, con el Barça más estabilizado, nadie descarta su continuidad. Varios factores juegan a favor de que Laporta presione a Xavi para prolongar el actual proyecto.
Xavi fue el fichaje de emergencia de Laporta en noviembre de 2021. En un Barça atormentado por su delicada situación económica y en crisis de resultados, el presidente despidió a Ronald Koeman y apostó por el técnico de Terrassa. Tres años después, el club sigue con números muy rojos y el equipo necesitará una ayuda divina para ganar un título en un curso muy movido. El técnico lo ha pasado muy mal en los últimos meses, pero la respuesta de los jugadores invita a soñar con ganar la Champions. El futuro no está escrito.
Dudas con el relevo
El Barça ha sondeado a varios entrenadores. A Joan Laporta le gusta Mikel Arteta y Pep Guardiola le ha recomendado el fichaje de Roberto de Zerbi. Deco apostaría por Luis Enrique. El problema es que los tres tienen contrato con sus clubes (Arsenal, Brighton y PSG) más allá del 30 de junio de 2024. Son, posiblemente, los tres entrenadores que, posiblemente, mejor encajarían en el universo azulgrana.
Laporta también ha sondeado el fichaje de Hansi Flick, técnico alemán que en 2020 ganó la Bundesliga, la Copa de Alemania, la Champions, la Supercopa de Alemania, la Supercopa de Europa y el Mundial de Clubes. También están en su agenda Julian Nagelsmann, actual seleccionador alemán, y Thomas Tuchel, técnico del Bayern.
Mikel Arteta aplaude a sus jugadores durante un partido de Premier League
El dinero
Xavi Hernández y su cuerpo técnico cobran unos 10-12 millones de euros por temporada. En el Atlético, Simeone cobra más del doble. El Barça está condicionado por sus limitaciones económicas. Ni puede pagar una fortuna al futuro entrenador ni puede prometerle grandes fichajes. Al contrario. El club prepara una o dos ventas importantes para cuadrar sus números.
De Zerbi saluda a Guardiola antes de un Brighton-City
Deco, director de fútbol del Barça, ya ha avisado de que "no habrá grandes fichajes en verano". La contratación de un mediocentro de primer nivel es prioritaria. También se busca un extremo zurdo. Antes, sin embargo, el Barça debe recaudar. Raphinha está en venta. También Koundé y Frenkie de Jong.
Luis Enrique, junto a Mbappe, tras finalizar un partido del PSG
La cantera
El futuro del Barça pasa por potenicar la cantera, más por necesidad que por convicción. La eclosión de Lamine Yamal, Pau Cubarsí y Héctor Fort ha sido muy bien recibida en el Johan Cruyff y, sobre todo, en las oficinas del Camp Nou. Xavi ha demostrado ser un técnico atrevido.
Fermín López y Lamine Yamal celebran un gol contra el Atlético de Madrid
Laporta solo prescindiría de Xavi si encontrara un entrenador con un gran currículo. Un técnico que, además, asumiera la necesidad de dar carrete a las jóvenes promesas de la cantera barcelonista.
Proyecto incompleto
Xavi asumió el mando del Barça en un momento muy complicado. Con una plantilla deprimida y decadente. Un año después, ganó la Supercopa de España y la Liga. Laporta se ilusionó después con levantar la Champions en el curso actual. El equipo no mejoró, involucionó. Harto de la respuesta de sus jugadores y de las críticas, el técnico de Terrassa estalló tras la derrota contra el Villarreal.
Xavi controla el balón durante la derrota del Barça contra el Villarreal
El entrenador del Barça, desde entonces, asegura que se ha liberado. Que trabaja con menos presión y que sus futbolistas también están más tranquilos. En muchas ruedas de prensa le siguen preguntando por su futuro y en la posibilidad de que siga un año más. "A día de hoy no contemplo esta opción", repite Xavi. Laporta y Deco, mientras, se muestran ambiguos. En el Camp Nou nadie descarta que Xavi cumpla finalmente su contrato, pero tampoco que se vaya. Si el Barça no gana la Liga ni la Champions, lo tendrá complicado.