El técnico del FC Barcelona, Xavi Hernández, no dejará el club en vano el próximo 30 de junio. El entrenador catalán ha plantado varias semillas que empiezan a germinar para el Barça del futuro. No hay mejor regalo de despedida que sentar las bases de un equipo ganador, cimentado en la Masía. Más allá de jovencísimas promesas como Lamine Yamal, Héctor Fort, Marc Guiu y Pau Cubarsí, el míster ha recuperado para la causa a tres cracks venidos a menos.
Jules Koundé, Andreas Christensen y Raphinha brillaron especialmente en la última victoria aplastante contra el Getafe (4-0). No sorprende tanto el buen hacer de valores seguros como Ilkay Gundogan. Sin embargo, los tres jugadores mentados habían perdido fuelle en los últimos meses, lejos de su mejor versión de antaño.
Koundé se afianza de lateral
Xavi nunca pierde ocasión de charlar individualmente con los futbolistas. Parece que esta vez ha dado con la tecla. Tanto para elevar sus prestaciones de aquí a final de temporada como aumentar sus respectivas cotizaciones en pro de posibles traspasos.
La lesión de Alejandro Balde devolvió a Koundé a una posición que no es de su agrado. Con esto, es ahí en el lateral derecho donde lo escuda Ronald Araujo y ha recuperado toda su capacidad defensiva. Ya dio visos de mejoría en Nápoles, donde Khvicha Kvaratskhelia dejó entre cero y nada en ataque. El zaguero francés no le concedió ni un metro de margen a su pareja de baile. Como tampoco se relajó un solo segundo ante el Getafe. En ataque, le sirvió a Raphinha la asistencia al espacio del gol que abrió la lata (1-0).
La reconversión de Christensen
También se dejó ver en campo rival Andreas Christensen. El central danés encadena cinco partidos consecutivos de pivote, con su actuación más convincente ante el Getafe. El nuevo mediocentro de Xavi se vistió de extremo en la segunda parte para servirle en bandeja a Joao Félix el balón del 2-0.
El míster no dudó en considerar la reconversión del zaguero a centrocampista como una de las claves de la mejora defensiva: "Siempre está pendiente de las vigilancias. Más los tres centrales de atrás bien posicionados, es una de las claves de la mejora del equipo".
La redención de Raphinha
Sin embargo, el MVP indiscutible fue Raphinha. El extremo brasileño regresó a la titularidad especialmente motivado. Le marcó un gol al equipo azulón, tuvo otros dos en sus botas, y entregó la asistencia del tercero a Frenkie de Jong. Fue la primera presencia en el once del delantero en este 2024. "Tenía muchas ganas de jugar este partido. Contra el Getafe me echaron y tenía esa espina clavada. Para mí este partido era especial", confesó a los micrófonos de Movistar tras el encuentro.
Una lesión muscular en el bíceps femoral izquierdo durante las semifinales de Supercopa apartó al atacante de 27 años de los terrenos de juego durante un mes. Desde su regreso contra el Granada, el 11 de febrero, disputó tres partidos de revulsivo antes de redimirse. No queda claro si la necesidad económica del Barça obligará a vender a Raphinha, pero el jugador ya pone de su parte para quedarse.