El FC Barcelona deberá recortar un poco más su masa salarial en verano. El club que preside Joan Laporta necesita alguna venta sonada y desprenderse de futbolistas que tengan una ficha muy elevada. Paralelamente, el máximo dirigente y su director de fútbol, Deco, priorizan tres o cuatro fichajes para reforzar una plantilla corta y descompensada.
Los dos objetivos más importantes son la contratación de un mediocentro de primer nivel y de un extremo izquierdo. Xavi quiere contar con un sustituto de garantías tras la marcha de Sergio Busquets y también quiere desequilibrio en ataque.
Las prioridades de Xavi
Martín Zubimendi, de la Real Sociedad, sigue siendo la gran obsesión de Xavi. El plan B es Joshua Kimmich, del Bayern de Múnich. El Barça, mientras, tiene muy avanzado el fichaje de Lucas Bergvall, un mediocentro sueco de 17 años que alternará el primer equipo y el filial. Es un jugador de futuro, pero no de presente.
El técnico de Terrassa también quiere un jugador que desborde por la banda izquierda. En el Barça gusta mucho Savio Moreira, del Girona, que tiene un gran uno contra uno y es una de las sensaciones del Girona. Deco, asimismo, sigue las evoluciones de Mitoma, del Brighton.
Un interior ofensivo
Laporta y Deco asumen que el Barça deberá hacer una gran inversión en estas dos demarcaciones. Xavi, por otra parte, también estaría encantado de contar con un interior ofensivo. Con un futbolista que rompa líneas y tenga gol.
El Barça, por otra parte, contempla otras opciones menos urgentes. Si logra renovar un año más la cesión de Cancelo, el club podría subir a Héctor Fort, del filial, mientras que para la banda izquierda podría recuperar a Álex Valle, cedido en el Levante. Sin embargo, no se descarta la llegada de un nuevo lateral.
Pendientes de Ter Stegen
Deco, asimismo, confía en que Ter Stegen se recupere plenamente de sus problemas lumbares tras ser operado. En el Barça están convencidos de que el portero alemán tiene cuerda para rato, pero quieren comprobar la evolución de la lesión.
El rendimiento de Iñaki Peña ha sido correcto, pero en el Barça creen que no tiene nivel para ser, habitualmente, titular. Ha cometido pocos errores, pero tampoco ha hecho grandes intervenciones. Su nivel es muy inferior al de Ter Stegen y el debate de la portería podría reabrirse en verano. Sobre todo, si el meta alemán no recupera su mejor nivel.