Joan Laporta, presidente del Barça, tiene que hacer malabarismos por la delicada situación económica del club. El máximo dirigente, optimista por naturaleza, no se resigna y confía en poder cerrar algún fichaje más en el mercado de invierno para Xavi Hernández. Paralelamente, también le gustaría contratar a un jugador de basket para Roger Grimau para mejorar el nivel de ambos equipos.
El Barça ya ha incorporado a Vitor Roque, fichado en verano, en enero. Oficialmente, el delantero brasileño sustituye a Gavi, lesionado de gravedad, que se incorpora al equipo en calidad de cedido, hasta el 30 de junio de 2024.
El fichaje de Vitor Roque
Xavi dio luz verde al fichaje de Vitor Roque porque no tenía un recambio para Lewandowski, pero su prioridad era un mediocentro. Oriol Romeu no ha dado el rendimiento esperado y el técnico de Terrassa quiere un jugador de rendimiento inmediato. La solución podría ser Kalvin Phillips, mediocentro de 28 años del Manchester City.
Deco, director de fútbol azulgrana, considera que Phillips es la mejor solución para las necesidades económicas. Ahora, sin embargo, falta convencer al Manchester City y al mismo jugador, que debería aceptar una importante rebaja salarial hasta el 30 de junio.
El Barça de basket
Laporta, por otra parte, también asume que el Barça de basket necesita refuerzos. Las lesiones de Laprovittola y Abrines han mermado el potencial del equipo. El dilema pasa por fichar a un escolta con buena mano o reforzar la posición de ala-pívot.
Jabari Parker, sustituto de Mirotic, va de menos a más. En ataque, es un jugador solvente. En defensa, no. El problema es que Óscar da Silva sigue sin dar el esperado salto de calidad y Grimau desearía contar con un jugador más intenso en defensa.