Xavi Hernández está en la cuerda floja. Ya lo estaba antes de la Supercopa de España, y la situación se ha agravado tras la dolorosa derrota frente al Real Madrid. El Barça está hundiéndose, y las respuestas del entrenador no convencen. Suenan como excusas, de hecho, para buena parte del barcelonismo.
Pocos minutos después de que el FC Barcelona cayera estrepitosamente ante el eterno rival, Xavi pidió perdón a la afición en rueda de prensa y ofreció una serie de justificaciones para explicar el mal juego. Unas palabras vacías para los culés.
El técnico reconoció que el conjunto blanco "fue justo vencedor", y que se esperó a que levantasen el trofeo para dar "la enhorabuena a Ancelotti, hemos hablado siempre muy coordialmente y con deportividad". Sobre el partido, remarcó que "nos ha hecho mucho daño el cómo hemos entrado al partido. Hemos salido de la peor manera en una final y además contra el Madrid, es inadmisible, nos ha tocado ir a remolque".
"Hemos estado mal en general, no hemos presionado bien, no hemos recuperado bien, no hemos parado las carreras, en las transiciones no hemos hecho faltas tácticas, cuando ellos viven de esto. Los goles vienen de pases al espacio ganando las espaldas y lo sabíamos", destacó el egarense.
El Barça empezó muy mal... como siempre
Aunque añadió que "tras el 2-0, que no puedes empezar perdiendo así una final, hemos reaccionado bien y hemos tenido buenos minutos hasta el gol de Robert Lewandowski. Y el penalti, que no era, nos ha terminado de matar. El equipo ha desconectado", justificó, a pesar de que buena parte del barcelonismo reconoce que el penalti de Araujo sobre Vinicius Jr era válido. O que, al menos, se podía pitar.
"No es una cuestión de hambre sino de errores. El fútbol es un juego de errores. Y no hemos minimizado los nuestros y hemos maximizado las virtudes del Madrid", quiso dejar claro el de Terrassa, apenas sin argumentos.
"Ha sido una derrota dura", confesó, asegurando que se siente "decepcionado, ya no como técnico sino como culé, porque hemos mostrado la peor cara del equipo en el peor escenario. Y quiero pedir las más sinceras y honestas disculpas a la afición, porque esta no es la imagen que tiene que mostrar el Barça en una final y menos contra el Madrid. No hemos estado al nivel ni a la altura de las circunstancias".
Críticas "merecidas" entre el barcelonismo
Pese a todo, Xavi sigue confiando "en el proyecto, en mí mismo y en el equipo, y creo que somos capaces de revertir la situación", apuntó. "Estoy preparado para aguantar las críticas, ya las había antes del partido y las ha habido siempre. Me siento fuerte, tranquilo, hoy es un paso atrás y un golpe duro, pero así es el deporte".
"Me he visto así en otras situaciones. No queda otra que aceptar la crítica, que habrá mucha y merecida, y a seguir trabajando". Crítica está habiendo, y se espera más a lo largo de la semana. Ganar el jueves a Unionistas de Salamanca en Copa del Rey, y además jugando bien, es obligatorio.