El último partido de la fase de grupos de Champions League no era tan intrascendental para el FC Barcelona. El club catalán perdió unos ingresos potenciales de 2,8 millones de euros por la derrota en Amberes. Es el premio que otorga la UEFA por cada triunfo en dicha fase de la máxima competición continental. Más allá del jugoso premio económico que no recibirá el Barça, el conjunto de Xavi Hernández arroja demasiadas dudas para los octavos de final.
"Las sensaciones no son buenas", admitió el propio técnico tras caer contra la Cenicienta del grupo. En Liga, el futuro no pinta nada alentador tampoco, a siete puntos del líder, el Girona. El parón de Navidad marcará un punto de inflexión, que condicionarán los dos próximos partidos contra Valencia y Almería. No se puede descartar ninguna medida si el juego del equipo no mejora.
Botín perdido
Solo por razones económicas, ya era menester regresar de Hamburgo --tropiezo ante el Shakhtar-- y de Bélgica con las victorias en el bolsillo. El Barça tendrá que regresar a Dallas para enfrentarse al América de México y recaudar una cifra entre los cuatro y cinco millones por un amistoso.
Las derrotas ante Shakhtar y Amberes han salido caras. Concretamente, el club de la capital catalana ha renunciado a un botín de 5,6 millones por dos victorias que se escaparon desde el primer momento. Por lo tanto, las primas quedan en 11,2 millones por cuatro triunfos, más 9,6 kilos por clasificar a octavos. Otros 10,6 millones están presupuestados por un hipotético pase a cuartos que en estos momentos se concibe como una utopía.
El clan alemán
De momento, ya hay un sector del vestuario desencantado con la gestión del míster de Terassa. El clan alemán, integrado por Ter Stegen, Robert Lewandowski, Ilkay Gundogan y Frenkie de Jong, no entiende algunas decisiones tomadas por el entrenador del primer equipo.
Robert Lewandowski, durante el Amberes-Barça
Lo que es irrefutable es el pobre nivel del conjunto. Como Xavi reconoció en rueda de prensa, el nivel de confianza de varios jugadores ha menguado en las últimas semanas y rinden por debajo de sus capacidades. El técnico no ha podido sacar la mejor versión del Barça, a pesar de contar con cinco refuerzos en verano. Para ejemplos, los Joaos, Gundogan y Oriol Romeu. El pivote de Ulldecona está irreconocible y quedó señalado especialmente por sus dos errores contra el Amberes.