Xavier Vilajoana Eduardo (Barcelona, 2 de enero de 1973) criticó la poca continuidad que el entrenador del Barça, Xavi Hernández, concede a los canteranos procedentes de la Masía. El exdirectivo del FC Barcelona durante las juntas de Sandro Rosell, Josep Maria Bartomeu y Joan Laporta ha lamentado especialmente el caso de Nico González. El pivote todavía propiedad del club azulgranase marchará traspasado al Oporto portugués con la incógnita de una opción de recompra en el aire.
"A Xavi le falta más confianza en los jóvenes de la casa. No me vale que me digan que ha hecho debutar a 25. Aquí de lo que se trata es de intentar dar continuidad. Yo prefiero cuatro jugadores con continuidad que 25 jugando unos minutos. No entiendo que no nos planteemos que venga Nico González, por ejemplo", manifestó en los estudios de Culemanía el que fuera candidato a las últimas elecciones del FC Barcelona.
La salida de Nico
El ya director deportivo del Barça, Deco, ha viajado a Portugal para cerrar una salida de Nico que Vilajoana no comprende. Al menos, el presidente de APCE y Construmat considera que el canterano de 21 años debe quedarse por delante de Franck Kessié.
"Nico la última etapa comenzó a jugar de pivote y desde mi punto de vista lo hizo muy bien. Aparte que puede ir mejorando. Tiene cosas a mejorar, pero trabajémoslas para que las mejore. Prefiero trabajar la adaptación de un Nico González salido de la casa que ya tiene la comprensión del juego que un Kessié de turno", afirmó contundente Vilajoana.
El valor añadido
El exjugador del ya extinto Barça C y de la sección de fútbol sala apeló a la seña de identidad de la Masía como un plus de los talentos curtidos en la cantera azulgrana: "Tengo claro que la gente que sale de la casa tiene un valor añadido por conocer el juego del Barça. Cualquiera de fuera tiene que estar dos peldaños por encima, porque los jugadores de la Masía todavía tienen que consolidarse y aprender".
Lo cierto es que esta temporada han debutado siete jugadores de la cantera a las órdenes de Xavi, aunque Héctor Bellerín es un caso aparte. Los demás, Iñaki Peña, Marc Casadó, Chadi Riad, Ángel Alarcón, Aleix Garrido y Lamine Yamal, han disputado minutos en partido oficial con el primer equipo azulgrana. Sin embargo, ninguno de estos jugadores ha conseguido derribar la puerta de la titularidad con asiduidad. El técnico egarense tiene esa asignatura pendiente con Garrido y Lamine a medio plazo, los productos más prometedores fruto de la cantera.
Dos casos paradigmáticos
El ejemplo más claro de ello se encuentra en Alejandro Balde, que al principio de temporada desconocía su futuro y paulatinamente le ganó el pulso por la titularidad a Jordi Alba: "Balde al principio claro que tenía deficiencias, que se consiguen subsanar con minutos y entrenándolo".
No así ocurrió con Ángel Alarcón, quien no ha conseguido asentarse todavía en el primer equipo a pesar de haber renovado hasta junio de 2025 con una cláusula de 400 millones de euros. Aun así, Vilajoana ve al delantero de 19 años en el centro de la línea de ataque
"Ángel como extremo es una alternativa, pero lo veo más como 9, porque su capacidad de mejorar en banda le da más capacidad como 9 de asociarse y venir a recibir. Delanteros centro sí que es verdad que buscas rendimiento inmediato en el primer equipo. Pero en esas segundas o terceras o terceras posiciones en la delantera sí que me pregunto por qué no pueden estar ocupadas por gente de la casa", ha dicho Vilajoana sobre la situación de Alarcón.
El porqué de la falta de confianza
Salvo en momentos puntuales en los que las circunstancias permiten alinear a jóvenes canteranos, solo Balde se ha consolidado en los esquemas de Xavi partiendo de cero. Esa falta de confianza en los demás talentos que carecen de experiencia nace, en palabras de Vilajoana, de "creer y tener confianza desde arriba".
Y es que "si la directiva solo valora el trabajo de un entrenador en función de los partidos o títulos que gana, este va a ir a lo seguro". El canterano azulgrana asegura en la entrevista que "hay otros entrenadores que no porque lleves 10-15 años jugando en otros equipos vas a jugar, eso es una confianza intrínseca".
En el filial, Vilajoana todavía comprende menos los fichajes traídos de fuera en una muestra de desconfianza hacia los juveniles de la casa: "Se han marchado 13 jugadores del Barça B que habían llegado el año anterior. Casi todos llegaron de fuera para irse al cabo de un año. Esto hace un daño terrible a los que van subiendo de juveniles. Esto es algo que quise evitar yo en su día. Si tienes un lateral derecho del Juvenil B con potencial, no fiches a un lateral de 20 años. Si quieres darle tiempo de maduración al juvenil, trae a otro jugador cedido".