El Barça tiene un dilema con Ansu Fati. El club ha puesto al delantero internacional en el mercado, pero sabe que el futbolista va recuperando su mejor nivel y solo tiene 20 años. Ansu tampoco está por la labor de irse a otro equipo, pero el Barcelona necesita dinero.
Ansu Fati acabó la temporada mejor que la empezó. Con goles y buenas sensaciones. Suplente habitual en el Barça, sus números son sorprendentes: ha participado en 51 partidos en los que ha marcado 10 goles y ha dado cuatro asistencias. Y ahora pide una nueva oportunidad porque quiere triunfar en el Barcelona.
El relevo de Messi
Etiquetado como el relevo de Messi hace dos años, las lesiones se han cebado con Ansu Fati. Primero fue un grave percance en la rodilla y después dos problemas musculares que han mermado su rendimiento. Su negativa a operarse le enfrentó con los servicios médicos del club.
El actual valor de mercado de Ansu Fati, según Transfermarkt, es de 35 millones de euros. Hace dos años era de 80 millones. Más del doble.
El discurso de Xavi
Xavi Hernández ha cambiado su discurso respecto a Ansu Fati en los últimos meses. En plena temporada dijo que era "intransferible". Meses después se mostró más ambiguo y aseguró que su futuro dependería del Fair Play Financiero.
Ansu Fati, de momento, pide otra oportunidad. Salvo sorpresa, no comenzará la próxima temporada como titular y le penaliza que Xavi apueste por jugar con cuatro centrocampistas en muchos partidos. El técnico, no obstante, sabe que es un jugador muy querido, un símbolo de la entidad.
Desborde y velocidad
En los últimos partidos, además, Ansu Fati parece haber recuperado el desborde y la velocidad. Es más valiente en el uno contra uno, pero todavía no ha recuperado su mejor versión, la que deslumbró en la temporada 2019-20.
La dirección deportiva, mientras, sondea su posible venta. Al ser un jugador formado en las categorías inferiores del club, dejaría más dinero que otros jugadores y el 20% de su traspaso iría directamente al límite salarial. Su salida, en definitiva, podría facilitar la llegada de otro jugador.