Ansu Fati lleva tiempo bailando en la cuerda floja. Una de las grandes joyas de la 'Masia' en los últimos años no ha vuelto a brillar desde que se lesionó la rodilla el 7 de noviembre de 2020, en un partido ante el Real Betis. Tras recuperarse, el delantero bisauguineano ha sufrido otras lesiones y no ha podido encontrar la continuidad que necesita un futbolista de 20 años.
Por ello, esta temporada no ha sido la deseada para Ansu en lo individual. El atacante no ha cumplido las expectativas goleadoras que se le presuponen a un jugador de su talla y le ha costado mucho hacerse un hueco en el once. El entrenador del Barça, Xavi Hernández, parecía haberlo escogido entre los candidatos para abandonar la disciplina azulgrana en este mercado de verano, pero en las últimas semanas, una nueva versión de Ansu Fati puede haber cambiado su opinión.
Xavi Hernández, junto a Ansu Fati en un entrenamiento del FC Barcelona / EFE
Ansu ha demostrado que se quiere quedar
El jugador sigue encabezado en seguir en el FC Barcelona pese a la insistencia de Jorge Mendes -su agente- en llenarle la mesa de suculentas ofertas para todas las partes. Es uno de los niños mimados de la afición, que corea su nombre cuando marca, y especialmente cuando falla, como muestra de cariño. Por el momento, Ansu está centrado en su deseo de continuar y, en los últimos meses, su gran rendimiento deportivo está empezando a convencer a la dirección deportiva del Barça.
El ariete culé renació como killer en las últimas jornadas de liga. Una vez conseguido el campeonato doméstico en el RCDE Stadium, el Barça rotó el equipo en las cuatro jornadas restantes y empezó a perder. Sin embargo, Ansu Fati, cuyo rendimiento parece inversamente proporcional al del conjunto de la plantilla, fue de lo poco que se salvó en los últimos partidos. Anotó tres goles en las dos jornadas finales (ante Mallorca y Celta) y se marchó de vacaciones con la moral alta.
Ansu Fati, en un partido con el Barça
La vuelta a la selección española le ha devuelto la sonrisa
Sin embargo, Ansu tuvo que posponer el inicio de su particular verano tras ser citado por Luis de la Fuente a última hora para jugar la final-four de la Nations League, a causa de la lesión de Nico Williams. Ansu volvía a la selección tras el Mundial de Catar, donde tuvo un escaso protagonismo, siempre como suplente. En esta ocasión, el seleccionador confió en el como revulsivo. Ante Italia entró en el último cuarto de hora y, en la final contra Croacia, su participación se expandió hasta los 55 minutos, prórroga incluida.
Ansu Fati, durante un entrenamiento con la selección española / EFE
Esta vez, Ansu no vio puerta, pero el tiempo que estuvo sobre el césped mostró el desparpajo y la agilidad que parecía haber perdido tras la lesión. Sin duda, un paso adelante, pero para nada definitoria. El examen final que decida su futuro tendrá lugar en Estados Unidos. La pretemporada confirmará si la racha actual del internacional español es flor de un día o sí de verdad nos encontramos ante el regreso definitivo de Ansu Fati. Juventus, Milan, Real Madrid y Arsenal serán sus obstáculos.