El presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, recalcó en una reciente rueda de prensa que el cierre del ejercicio económico 2023-24 dará "resultados ordinarios positivos". Un hito que ha incidido en el aumento de 222 millones de euros del límite salarial del club azulgrana en la última actualización de la Liga. Lo cierto es que los ingresos por traspasos han salvado los resultados de explotación desde la temporada 2017-18.
Las ventas de jugadores no forman parte de la actividad ordinaria de las entidades deportivas, según apuntan algunos expertos en contabilidad. La mayoría de los clubes, en cambio, no comparte esa opinión. Algunos, como el Barça, incluyen desde hace años dichos ingresos extraordinarios en la balanza para los resultados de explotación. De este modo se han esquivado las pérdidas operativas desde la junta directiva encabezada por Josep Maria Bartomeu. Sin embargo, contabilizando estrictamente los cobros ordinarios, dejando a un lado extras como traspasos de futbolistas --beneficios por inmovilizado intangible deportivo-- y palancas, la institución catalana habría registrado pérdidas los últimos seis años.
La venta de Neymar
Esta conclusión se extrae de los números circunscritos a la actividad ordinaria del Barça en la cuenta de pérdidas y ganancias. Con Josep María Bartomeu en la presidencia, la premisa de "el dinero en el campo y no en el banco" se estrelló con los estragos económicos del coronavirus.
En el ejercicio 17-18 el importe neto de la cifra de negocio aumentó de 638 a 686 millones. Por contra, los gastos de personal se dispararon de 378M a 529M. El desembolso total de 859M habría ocasionado 173M de pérdidas. Básicamente, los 209M procedentes de la salida de Neymar --beneficios procedentes de inmovilizado intangible deportivo-- equilibran la balanza hasta anotar 32M de beneficios en el resultado de explotación.
Masa salarial desorbitada
El salto insólito de ingresos hasta los 836,7 kilos en la temporada 18-19 no bastó para librarse de unas pérdidas ordinarias de 85,6M. La losa del gasto de 939,4M, con una repartición de salarios de personal de 541M, precisó de la intervención de las operaciones extraordinarias. Los 103,1M de resultado por enajenaciones de inmovilizado salvaron un resultado de explotación positivo de 17,5M.
En 2020, primer cierre condicionado por el Covid, la pandemia redujo los ingresos hasta los 708,2M. Pese a la rebaja de la masa salarial total a los 487,1M, la burbuja estalló en la cara del club ante un contratiempo de magnitudes bíblicas como una pandemia. El gasto disminuyó ligeramente a 903,2M, por lo que las pérdidas operativas se dispararon otra vez a los 172,9M. Ni el resultado positivo de 73M por enajenaciones del inmovilizado obró el milagro. El resultado de explotación dio negativo: 99,8M.
Traspaso de poderes
Tras la dimisión en bloque de la junta de Bartomeu a finales de 2020, la candidatura de Joan Laporta ganó los comicios presidenciales en marzo de 2021. El traspaso de poderes conllevó que las amortizaciones imputadas aumentasen a 174,9M; el resultado por enajenaciones también dio negativo: 156,5M de pérdidas. Por ende, el resultado de explotación se disparó a los 505M. Aquella vez, los ingresos extraordinarios ensancharon el agujero ordinario de 348,4M, originado por una facturación mínima de 575,4M y unos gastos de personal estabilizados en 489,6M.
En el curso 21-22, el primero completo de la junta de Laporta, los ingresos ordinarios repuntaron hasta los 628M. En contraste, el dispendio en personal decreció mínimamente a 457,2M. El resultado de explotación sin traspasos volvió a dar unas pérdidas de 156,8M. En el verano de las palancas, el valor por enajenaciones de inmovilizado se infló hasta los 314M, por lo que el beneficio antes de intereses e impuestos dio 157,5M.
El arreglo de Barça Studios
La venta de patrimonio --Barça Studios y derechos televisivos-- volvió a tener una importancia capital en 2023. En la campaña 22-23, los fichajes de Lewandowski, Koundé y Raphinha, entre otros, relanzaron el gasto de personal hasta los 625M.
Los ingresos ordinarios de 796M volvieron a sucumbir ante los 1.125,6M de gastos. Los ingresos pertenecientes a inmovilizado intangible no deportivo --399M-- y los 208M de valoración otorgada al 51% de Barça Studios rescataron un resultado de explotación de 264M en positivo. Dicha participación en la sociedad audiovisual se tasó mediante el principio de puesta en equivalencia, en proporción al 49% que se había vendido por 200M.
Récord de ingresos de BLM
Este 2024, el Barça se ha enfrentado a su primer año sin el impulso de las palancas financieras tras la pandemia. "Hacía siete años que no teníamos un resultado ordinario positivo", respondió Laporta a Culemanía en la rueda de prensa para valorar el mercado de fichajes veraniego. Falta por conocer con exactitud los números verdes, que se concretarán en la reunión ordinaria de la junta directiva, el jueves 26 de septiembre. El otro gran interrogante de las cuentas versa sobre los ingresos procedentes de traspasos. ¿Volverán a imputarse como ordinarios o se anotarán como extraordinarios?
La entidad barcelonista ha perdido 100 millones de ingresos mediante el traslado a Montjuïc y ha renunciado a otros 40 millones anuales desde que se activó la palanca de los derechos televisivos --venta del 25%-- en 2022. Con esto, la plana mayor azulgrana ha conseguido paliar el agujero de 140 millones gracias al récord de facturación de Barça Licensing & Merchandising (BLM) --prevista en 120 millones en las partidas--. La renovación del patrocinio con Nike también desbloqueará el cobro de 18 millones, previsto en los presupuestos. Dicha cantidad se había quedado en el limbo tras el último litigio.
Maniobra contable: inmovilizado
Hasta la fecha, el resultado de explotación del club catalán abarcaba también el "resultado por enajenaciones del inmovilizado". Sin ese matiz decisivo, no sería posible presumir de beneficios ordinarios. Como recoge el club en la última memoria, este apartado de la cuenta de pérdidas y ganancias corresponde a la "venta de jugadores", "otros beneficios generados en concepto de los cobros recibidos de variables por el rendimiento deportivo acordado en diferentes contratos de venta de derechos federativos" y "traspasos a otros clubes de jugadores que formaron parte del club en ejercicios anteriores".
En cambio, el Real Madrid ya ha alcanzado el horizonte de los 1.000 millones de ingresos ordinarios sin recurrir a la enajenación de inmovilizado porque lo interpreta como extraordinario. En su síntesis económico-financiera de la temporada 23-24, el club presidido por Florentino Pérez agrupa los ingresos con el matiz "antes del resultado de enajenación de inmovilizado". En el tramo 22-23, sin contar las ventas de jugadores, la institución madridista ingresó 843 millones y dio 11,8M de beneficios. Un año más tarde, ha ingresado la cifra récord de 1.073,2M, con unas ganancias de 15,6M tras impuestos.
El Real Madrid marca el camino
En el Santiago Bernabéu marcan el camino a seguir a sus homólogos azulgranas. La Liga ha recompensado el esfuerzo de contención del gasto y recaudación de ingresos en can Barça con un límite de coste de plantilla deportiva de 426 kilos. Aun así, el Real Madrid sigue a años luz con 755 millones.
Eduard Romeu, ya exvicepresidente económico del FC Barcelona, vaticinó en el evento El futuro del Barça, en juego, organizado por Culemanía, que los ingresos por traspasos serían el indicativo de la recuperación económica en las cuentas anuales: "El Barça estará realmente bien el día en el que la venta de jugadores sea un extraordinario, que tanto en el período vuestro --Bartomeu-- como el nuestro es ordinario".