El último año de Lamine Yamal es un acontecimiento pocas veces visto en el mundo del fútbol. Mucho se hablaba de su talento en la Masía, pero con solo 16 años ha logrado romper rápidamente varios techos que le han llevado a ser una pieza clave en el FC Barcelona y en la selección absoluta de España. El timing de la trepidante progresión del joven canterano azulgrana supone un pelotazo descomunal para Jorge Mendes en el sector de la representación.
Conocido como el superagente de jugadores por su habilidad negociadora, el portugués consiguió hacerse con la gran joya del Barça antes de irrumpir en la élite. Lamine Yamal formaba parte de la agencia de Iván de la Peña, pero el conocido representante pudo seducir al entorno del atacante con una oferta difícil de igualar. Con ese golpe sobre la mesa, Jorge Mendes tiene al sucesor definitivo de Cristiano Ronaldo en el mercado de fichajes.
Lamine lidera en Gestifute
Aunque el fútbol de Lamine Yamal se asemeja más al de Leo Messi, lo cierto es que su representante lo visualiza como el elegido para heredar con el trono de CR7. Todavía es muy pronto para hablar de ello, especialmente por el legado futbolístico del jugador portugués. Sin embargo, en términos financieros, el crack del FC Barcelona ya ocupa el lugar de Cristiano como el jugador más cotizado de Gestifute en el mercado.
Gestifute, agencia liderada por Jorge Mendes, es una especialista en generar dinero por los numerosos futbolistas de élite que la integran. A pesar de tener 16 años, el canterano del Barça ocupa el primer lugar con un valor de mercado de 90 millones de euros, de acuerdo con las últimas estimaciones de Transfermarkt. El podio de la empresa la completan Ruben Dias con 80 millones y Bernardo Silva con 70 millones, ambos pertenecientes al Manchester City de Pep Guardiola.
Esa última valoración del conocido portal se realizó el pasado mes de julio, antes de darse la espectacular participación de Lamine Yamal (1 gol y 3 asistencias en seis partidos) en la Eurocopa. De mantener esa progresión, el atacante azulgrana apunta a romper el techo que consiguió Cristiano Ronaldo, que alcanzó los 120 millones en 2015 y 2018. Mendes tiene en sus manos a una perla que puede romper barreras en el mercado del fútbol internacional, lo que pone en alerta al FC Barcelona.
El poder de Jorge Mendes
No es secreto para nadie que Jorge Mendes tiene una enorme influencia en el Barça de Joan Laporta. No solo por representar a Lamine Yamal, sino también a otras perlas del club azulgrana como Ansu Fati, Alejandro Balde, Guille Fernández y Pedro Fernández. También gestiona la carrera de futbolistas que gustan mucho a la dirección deportiva como Joao Cancelo y Joao Félix, aunque estos últimos apuntan a seguir sus carreras en otros equipos por las limitaciones financieras del FC Barcelona.
El poder de Jorge Mendes es considerable, sobre todo por la necesidad del Barça de mantener a un crack como Lamine Yamal en el eje del proyecto deportivo. El año pasado lograron mejorar su contrato, con una cláusula de rescisión de 1.000 millones de euros, pero la expectativa de la directiva de Laporta es cerrar unas nuevas condiciones contractuales cuando el futbolista cumpla la mayoría de edad el 13 de julio de 2025.
La renovación de Lamine Yamal
Laporta tiene una estrecha relación de amistad con Jorge Mendes, pero igualmente busca mantener contento al superagente con motivo de las futuras negociaciones para renovar a Lamine Yamal. Esa situación implica que el mandatario culé cede en algunas decisiones de la planificación deportiva, como es el caso de hacer lo posible para dar encaje a alguno de los Joaos o apostar por Ansu Fati en la temporada 2024-25.
La principal lucha la protagonizan Ansu Fati y Joao Félix, debido a que teóricamente comparten la misma posición en el frente de ataque. Si sale uno, el otro debe tener cabida en el Barça del siguiente curso. Es el objetivo de los altos mandos del club para mantener feliz a un Jorge Mendes que aspira a que Lamine Yamal se convierta en el futbolista más cotizado de todo el mercado. Un trono que llegó a ocupar Cristiano Ronaldo --junto a Leo Messi-- en algunos tramos de su longeva carrera.