Elena Fort y Sergi Atienza quedan señalados por el código ético. La vicepresidenta institucional y el jefe de cumplimiento --compliance officer-- del FC Barcelona fueron duramente criticados por Víctor Font en la última comparecencia con los medios de comunicación. El que fuera candidato a la presidencia del club azulgrana ha cargado contra ambos por la enorme polémica de los 350.000 euros que aportaron en la agencia ISL Futbol LLC a la junta directiva en 2021 con motivo de los avales que necesitaban para presidir la entidad culé.
El líder de Si al Futur aprovechó un artículo del código ético del Barça para exponer la situación de la entidad presidida por Joan Laporta: "El código ético actual, que fue readaptado para poder incluir a amigos y familiares, dice que 'el personal del FC Barcelona no podrá aceptar un beneficio personal de un proveedor, la destinación del cual pueda comprometer su imparcialidad u objetividad'".
Críticas a Fort y Atienza
"Parece que se ríen de nosotros, porque si creen que se puede guardar debajo de la alfombra algo como lo de los avales diciendo que esto es un tema estético, cuando todo el mundo sabe que no es un tema estético. Yo aún espero que la Comisión de Ética y Disciplina, que creo que preside Elena Fort, dé un paso hacia adelante y explique qué es lo que pasa aquí", señaló el empresario catalán.
"Además dicen que es un tema estético porque lo dice el compliance, que es un amigo de la directiva. Que vayan a un órgano independiente objetivo y que le pregunten si es un tema estético. Si ellos dicen que es un tema estético, pues lo creeremos. Es lo mismo con las comisiones de Deco, cuando estás cobrando una comisión por avanzado de un fichaje que era representado tuyo. Como mínimo ético no es", sentenció Font.
El escándalo de los avales
ISL es una empresa que ha formalizado numerosos negocios con el Barça desde 2015, cuando recién empezaba la etapa presidencial de Josep Maria Bartomeu. Esa vinculación comercial es lo que ha provocado que existan críticas por el conflicto de intereses que genera que dicha agencia decidiera aportar 350.000 euros a la actual junta a comienzos de 2021, especialmente cuando un año más tarde se hicieron cargo de organizar la gira de pretemporada del primer equipo en Estados Unidos.
Desde el Barça han expresado que el acuerdo no ha representado ningún conflicto de interés, sobre todo por el análisis del compliance. Sin embargo, la recordada relación de Joan Laporta con Sergi Atienza --compartieron despacho durante más de siete años-- genera muchas dudas en el barcelonismo. Tanto entre los grupos de socios más críticos como Dignitat Blaugrana como el reciente caso de Víctor Font.