Laporta: una gestión con muchos altibajos y demasiados suspensos

Joan Laporta es el único presidente del FC Barcelona que puede presumir de haber ganado dos Champions. Y, con él como máximo dirigente, el club ha logrado cinco Ligas (cuatro en la primera etapa y uno en la actual), entre otros títulos. Laporta también será recordado por ser el presidente del 2-6 del Bernabéu y del sextete en 2009. La cara B, en cambio, no es tan amable. En cuatro de sus 10 cursos al mando del Barça, el equipo de fútbol no ha ganado un título. Y en otro, en la 2006-07, solo ganó la Supercopa de España.

El Barça ha sufrido grandes vaivenes con Laporta de presidentes. Momentos álgidos y caídas salvajes. En 2003 heredó un club deprimido y activó, con bastante éxito, el llamado círculo virtuoso. En la primera temporada, el equipo de Frank Rijkaard no ganó ningún título, pero fue de menos a más. En los dos años siguientes, el Barcelona ganó dos Ligas y la Champions.

La autocomplacencia

La autocomplacencia fue el gran mal del Barça de Rijkaard y Ronaldinho. Y de Deco. En su cuarta y quinta temporada como presidente, el equipo se destensó. Se perdió por la noche barcelonesa. Tras dos años horribles, Laporta salvó un voto de censura por los pelos. Con el 60,60% de los votos en contra.

Deco, junto a Ronaldinho, en un partido con el Barça REDES

La segunda gran crisis de Laporta --en la primera dimitieron Rosell, Bartomeu, Faus, etcétera-- puso contra las cuerdas al abogado barcelonés. Entonces, Laporta encontró la solución a todos los males en el fichaje de Pep Guardiola, que lideró una espectacular transformación del equipo. En 2009, el Barça ganó la Liga, la Copa, la Champions, la Supercopa de España, la Supercopa de Europa y el Mundial de Clubes. Fue el primer equipo que logró el sextete.

Guardiola, manteado tras ganar el Barça la Champions de 2009 EFE

El segundo mandato

Laporta cerró su primer mandato con otra Liga y con muchas facturas. La mala situación económica contrastaba con la bonanza de un equipo único. Once años después, el actual dirigente ganó en las urnas por goleada y heredó un club peor que en 2003. Pero peores también han sido sus remedios.

Koeman sauda a Messi EFE

En 2021, con Koeman de entrenador, el Barça ganó la Copa del Rey, pero Laporta dudó del héroe de Wembley. Entonces le anunció que sería despdido si no encontraba, en dos semanas, un técnico mejor. Despreció a Xavi, por haber apoyado la candidatura de Víctor Font, pero cambió el guion cinco meses después. Más impopular fue su decisión de no renovar el contrato de Leo Messi, tras proclamar que convencería al futbolista con un asado.

La noche del Eintracht

La temporada 2021-22 fue horrorosa. El equipo no ganó nada y la afición del Barça estalló el día que 40.000 aficionados del Eintracht invadieron el Camp Nou y eliminaron al equipo de Xavi.

Los aficionados del Eintracht celebran la clasificación de su equipo en el Camp Nou / EFE

Contra las cuerdas, Laporta activó las famosas palancas. Vendió activos del club para poder fichar a Kessié, Christensen, Lewandowski, Raphinha, Koundé, Bellerín y Marcos Alonso. Afortunadamente, el Barça ganó la Supercopa de España y la Liga en 2023.

Hansi Flick, el nuevo Guardiola

Convencido estaba Laporta de que ya había encontrado la tecla para dominar Europa. Elevó el nivel de exigencia a Xavi y le pidió la Champions. El Barça, sin embargo, solo pudo invertir 3,4 millones en el fichaje de Oriol Romeu. Fue el equipo que menos gastó y el desenlace no pudo ser más decepcionante. El Barça ha terminado el curso actual sin un título, con Xavi ratificado primero y despedido después, y agarrándose a Hansi Flick para soñar con otro milagro. Como el de 2008.

Joan Laporta presenta a Hansi Flick como entrenador del Barça FCB