La gran asignatura pendiente del Barça en materia de sponsors

El FC Barcelona Femenino ha conseguido restablecer los puentes entre el club azulgrana y las aerolíneas. La entidad no se aliaba con una compañía aérea desde que rompiera con Qatar Airways en 2017. Hasta que la sección ha anunciado un acuerdo de patrocinio con Vueling hasta junio de 2026. Salvando las distancias, se trata de un trato de esponsorización a escala nacional y exclusivo de la sección. Aun así, marca el camino a seguir con una potencial línea de negocio lucrativa que llena las arcas de los mejores equipos europeos.

Las connotaciones éticas envolvieron en polémica la última alianza comercial entre Barça y Qatar Airways en 2017. Anteriormente, Turkish Airlines había patrocinado al FC Barcelona entre 2010 y 2013 como aerolínea oficial del club por tres millones por curso.

Discrepancias económicas

Los tratados comerciales con el régimen del golfo Pérsico se remontan a 2010, cuando Sandro Rosell selló un pacto con el Gobierno catarí como primera marca comercial que luciría la camiseta barcelonista. En enero de 2011, Qatar Foundation, empezó a mostrarse en el pecho de la equipación como nuevo patrocinador hasta 2016, por un importe total de 165 millones de euros.

Dos años más tarde, en 2013, Qatar Airways sustituyó a la anterior marca. En 2015, el por aquel entonces vicepresidente económico Javier Faus, logró ampliar el acuerdo a razón de 60 millones anuales. Sin embargo, el también expresidente del Círculo de Economía hizo las maletas con el aterrizaje de Josep Maria Bartomeu como sucesor de Sandro Rosell. Si bien sentó las bases de una nueva alianza más beneficiosa, el nuevo mandatario de la entidad quiso exigir todavía más dinero y se rompieron las negociaciones. 

Siempre rodeado de fuertes discrepancias entre opositores de la presidencia como Joan Laporta o Elena Fort, el acuerdo con Qatar siguió en pie en las condiciones económicas iniciales hasta 2017. Bartomeu encontró a Rakuten, nuevo sponsor principal que desembolsó 55 kilos y superó holgadamente los 33,5M de su antecesora.

Otros clubes europeos

Desde entonces, la vacante de aerolínea ha quedado huérfana en Can Barça. Curiosamente, en 2018, Qatar Airways firmó con el Bayern de Múnich en un acuerdo que rondaba los 20 kilos anuales. Tras un lustro de patrocinio, las fuertes presiones de los aficionados bávaros provocaron que el matrimonio de conveniencia se rompiera de mutuo acuerdo en 2023.

Pero la misma compañía aérea ya había encontrado otro gigante europeo en el que anidar, más afín a su procedencia. El Paris Saint-Germain, propiedad del fondno de inversión Qatar Sports Investments (QSI), anunció a Qatar Airways como nuevo patrocinador principal. Aunque la duración de la alianza no trascendió, L'Équipe tasó el acuerdo entre los 60 y 70 millones al año.

No es precisamente una rara avis encontrar aerolíneas entre los main sponsors de los clubes de élite en el viejo continente. Sin ir más lejos, en los cuartos de final de la Champions League, a excepción de Barça y Bayern todos los equipos contaban con compañía aérea. Emirates patrocina simultáneamente a Real Madrid y Arsenal, Riyadh Air al Atlético de Madrid, Etihad Airways al Manchester City y Eurowings al Borussia Dortmund.

¿Qué pasa con el Barça?

En lo que atañe al FC Barcelona, el Femenino ha dado el primer paso de reconciliación con el sector de las aerolíneas. Como club, el Barça ya tiene comprometida la serigrafía de su camiseta con sus main partners Nike y Spotify. Aun así, desde la entidad admiten a Culemanía que es una línea potencial para abordar en el futuro.

De este modo, no es descabellado pensar en un pacto de mayores dimensiones en el plano internacional que englobe a toda la entidad e involucre a un nuevo gigante de la aviación.