En la sala de prensa del Estadio Lluís Companys se dio a conocer la decisión de Xavi Hernández de dar un paso al costado como entrenador del FC Barcelona. Esa salida será el 30 de junio, o en otras palabras, al finalizar la presente temporada. Justo antes de iniciar la comparecencia ante los medios de comunicación, se creó un ambiente de suma tensión, en especial por el tiempo de demora del técnico egarense, producto de la presión que recibió de Joan Laporta.
El propio Xavi afirmó en rueda de prensa que "llevo mucho tiempo pensándolo y necesitamos un cambio de dinámica", por lo que el anuncio cae de forma sorpresiva a falta de varios meses para terminar la 2023-24. La clave de esa precipitación del entrenador azulgrana es el gabinete de crisis que se dio en una de las salas de Montjuïc, en donde se reunió Laporta con Rafa Yuste, Deco, Enric Masip, Joan Soler y Alejandro Echevarría para valorar la situación.
Tras esa reunión, Xavi es informado de que el dirigente quiere hablar con él. Entonces es cuando decide anunciar su desvinculación definitiva del club a partir del 30 de junio. La declaración del de Terrassa responde a la presión de los altos mandos, sobre todo cuando tuvo que hablar prácticamente solo ante los medios de comunicación. Esa soledad no es nueva para el técnico, recordando que las derrotas en la Supercopa de España y la Copa del Rey las tuvo que enfrentar únicamente con su staff.
Los jugadores, sorprendidos
Otro detalle que también refleja que la decisión de Xavi se da a partir de la reunión de la comisión es que en zona mixta se mostró firme y seguro de tener las energías necesarias para dar vuelta a la dinámica actual. Palabras que no coinciden en absoluto con lo que posteriormente se vio en la rueda de prensa, dejando claro que hubo un factor que condicionó por completo su pensamiento inicial.
Xavi Hernández, cabizbajo durante el Barça-Villarreal
Aunque lo más llamativo es que el entrenador no comunicó primero a sus jugadores de la determinación de marcharse al final del curso. Lo hizo primera ante la prensa, con la que ha tenido varios roces en la 2023-24. Por otra parte, capitanes como Frenkie de Jong y Ronald Araujo habían enviado mensajes de apoyo en zona mixta, lo que implica que no estaban enterados de ese posterior anuncio.
El foco pasa a Laporta
El paso adelante de Xavi de anunciar su salida del FC Barcelona supone una jugada que le permite liberarse de la presión constante a la que se estaba enfrentando por el estancamiento en el juego y el retroceso en los resultados. El mes de enero ha sido un caos absoluto por la eliminación en la Supercopa y la Copa del Rey, además de que la Liga se complica cada vez más al estar a 10 puntos atrás del Real Madrid.
Joan Laporta, junto a Rafa Yuste, en el palco de Montjuïc
Pero también significa que ahora el foco de una parte del barcelonismo va a empezar a crecer hacia el sector del palco azulgrana. En este sentido, Laporta está en la obligación de no titubear en las siguientes decisiones relacionadas al proyecto deportivo y Deco también debe empezar a influir de forma contundente en términos de fichajes.
Por ahora, Xavi espera cerrar su ciclo con el Barça en las mejores condiciones posibles. El objetivo principal es asegurar a toda costa la clasificación a la siguiente edición de la Champions League --tercero en la tabla-- y superar los octavos de final contra el Nápoles. Esos son los objetivos que se marca el de Terrassa antes de decir adiós a los aficionados azulgrana, al menos como entrenador.